CASO VINICIUS

LaLiga pide competencias sancionadoras "para luchar más eficazmente contra el racismo"

El organismo que preside Javier Tebas quiere cerrar estadios o multar a los socios sin depender de la Comisión Antiviolencia o el Comité de Competición de la RFEF

Vinicius Junior, jugador del Real Madrid, sale de Mestalla el pasado fin de semana tras los incidentes.

Vinicius Junior, jugador del Real Madrid, sale de Mestalla el pasado fin de semana tras los incidentes. / JOSE JORDAN / AFP

Denís Iglesias

Denís Iglesias

LaLiga, entidad que preside Javier Tebas, solicitará tener más competencias sancionadoras "con el objetivo de poder ser más ágiles y eficaces en la lucha contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte". El comunicado de la patronal llega después de los últimos incidentes contra Vinicius en Mestalla y de que el jugador tachara de racista al propio organismo. LaLiga reivindica que lleva años "liderando la detección y denuncia de estos comportamientos", pero que se siente "impotente al observar cómo terminan sus denuncias".

Procesos sancionadores enquistados

Cabe recordar que la decena de procesos sancionadores que se han abierto por el acoso xenófobo contra el jugador brasileño se han quedado enquistados en los tribunales: bien por la no identificación de los responsables o por otras causas que han dejado sin castigo efectivo estos actos. Precisamente, este martes se ha procedido a la detención de cuatro individuos que supuestamente habrían colgado un muñeco de Vinicius en la previa al derbi contra el Atlético.

El árbitro de Burgos Bengoetxea (2d) habla con el delantero brasileño del Real Madrid Vinícius Júnior (d) durante el partido correspondiente a la jornada 35 de LaLiga Santander que disputaron Valencia CF y Real Madrid este domingo en Mestalla (Valencia).

El árbitro de Burgos Bengoetxea habla con el delantero brasileño del Real Madrid Vinícius Júnior. / AFP

"Ante esta grave situación, en los próximos días LaLiga solicitará formalmente que se proceda a la modificación de la Ley 19/2007, de 11 de julio, contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte y de la Ley 39/2022, de 30 de diciembre, del deporte", explica LaLiga en su comunicado. Lo que busca con este movimiento es disponer de herramientas para la clausura total o parcial de un recinto deportivo, la prohibición de acceso al mismo de los socios o abonados; y la imposición de sanciones económicas. Actualmente, estas resoluciones se adoptan y se publican en el portal de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte.

Falta de actuación de las Fiscalías de Odio

A esta se refiere LaLiga en su comunicado, afirmando que le remite a ésta y al Comité de Competición de la RFEF "un escrito con aquellos cánticos que se producen en los encuentros de fútbol que inciten a la violencia o tengan un contenido insultante o intolerante". Además, cuando se detectan insultos susceptibles de poder ser tipificados como delito de odio, la patronal denuncia estos hechos en la Fiscalía.

Sin embargo, cuando llegan a esta instancia, LaLiga observa "con impotencia cómo estas denuncias son archivadas sin ni siquiera llegar a los juzgados, o cómo las Fiscalías de Odio de cada región no tienen un criterio uniforme a la hora de calificar estos hechos". Una circunstancia denunciada igualmente por Esteban Ibarra, presidente del Movimiento contra la Intolerancia, en declaraciones a este diario.

Procedimientos policiales contra los denunciados

"Un déficit que observamos afecta a la detección de problema. Muchas veces, las denuncias que hemos puesto nosotros, como con el caso Vinicius en el Metropolitano, se archivan por falta de identificación de sus autores. Y eso que había vídeos. Es inexplicable. Si los delitos de odio no vienen acompañados de una acción policial o de la seguridad del propio club o la identificación de los denunciados, será difícil para Fiscalía incluso aplicar un procedimiento penal, que es lo que correspondería", explicaba Ibarra.

Florentino Pérez y Vinicius.

Florentino Pérez y Vinicius. / REAL MADRID

En su escrito, LaLiga hace públicas algunas motivaciones que han sido utilizadas para archivar sus denuncias, con argumentos tales como que "del estudio de las redes sociales del denunciado, parece desprenderse que el mismo no es una persona que pretenda incitar al racismo, o que los gestos realizados pretendieran alcanzar tal fin"; que "no se logró la identificación de los autores de los hechos” por parte de las autoridades policiales" o que "la expresión y sonidos proferidos, sin duda propios de actitudes soeces y deleznables, a la par que vejatorias y absolutamente rechazables, no parecen revestir inicialmente, para el presente caso, la dimensión penal pública que se postula”.

LaLiga decidió dar un paso más en su estrategia legal y acudir directamente a los juzgados. "Pero a pesar de ello, dotar a LaLiga de una mayor capacidad sancionadora supondría una herramienta eficaz en la lucha contra el racismo en el deporte", sentencia la patronal, quien detalla el estado de los casos en los que ha participado como parte activa. Todos ellos enquistados en uno u otro punto del proceso, situación por la que reclama competencias sancionadoras.