TENIS | MUTUA MADRID OPEN

Alcaraz se divierte ante Dimitrov

El tenista murciano se reencuentra con su mejor versión, doblega al búlgaro en apenas una hora y media (6-2; 7-5) y se cita en octavos con Zverev, su rival en la final del año pasado. Además, Alejandro Davidovich se impuso de madrugada a Holger Rune (7-6, 5-7 y 7-6)

Carlos Alcaraz, en su partido ante Dimitrov.

Carlos Alcaraz, en su partido ante Dimitrov. / EFE

Daniel Gómez Alonso

Daniel Gómez Alonso

Después de la tempestad, llegó la calma al Mutua Madrid Open. Si el estreno de Carlos Alcaraz en la Caja Mágica estuvo cargado de dramatismo, hasta el punto de asustar a una grada que después de un año esperando llegó a temer que fuera eliminado a las primeras de cambio, lo de este domingo fue una historia diametralmente diferente y mucho más plácida. Pudieron disfrutar los cerca de 12.000 espectadores que casi llenaron la pista Manolo Santana en una sesión nocturna en la que el número 2 empezó a recuperar sensaciones y selló su presencia en octavos de final (6-2; 7-5 en 1 hora y 30 minutos) sin demasiado desgaste.

"Soy una persona que aprende de lo que ha hecho mal, y había muchas cosas que mejorar con respecto al primer día. Teníamos claro que teníamos que salir a disfrutar, a desplegar el juego que sabemos hacer, jugar al ataque y sonreír, y esa ha sido la clave", respondió tras el choque Alcaraz, que sumó su 17ª victoria seguida en suelo español.

Aparecía Dimitrov en el horizonte como un rival propicio para ello. Poco queda de aquel jugador que deslumbró en sus inicios y que llegó a ser conocido como el 'baby Federer'. Su revés a una mano, tan estético como impreciso, y la poca contundencia en el cuerpo a cuerpo que le han pesado durante toda su carrera parecían un caramelo para un Alcaraz que necesitaba coger ritmo y fluidez en la altitud de Madrid antes de verse las caras en octavos con su rival en la final del año pasado, el alemán Alexander Zverev, que hoy apalizó (6-1 y 6-0) al francés Hugo Grenier.

Lo aprovechó el murciano, que en el primer set fue un ciclón. Rápido de piernas, las bolas sencillas que el otro día se marchaban por medio metro hoy caían en la línea y la derecha, agarrotada entonces, hoy fluía y encontraba las esquinas (solo 4 errores no forzados y 16 golpes ganadores). Apenas dio opción al saque el vigente campeón en el primer parcial, concediendo solo tres puntos a Dimitrov, y quebró en el inicio y en el cierre del set a base de machacar el revés del búlgaro.

Rápida reacción

Se vio tan superior el número 2 que quiso hacer disfrutar a la grada, en la que se encontraban varios jugadores del Real Madrid como Vinicius o Rodrygo, y se pasó un poco de virtuoso en el segundo set. El búlgaro, tirando de su mejor arma, el saque, se metió en el partido y llegó a quebrar el servicio de Alcaraz para ponerse 2-4 arriba, pero fue un espejismo.

Carlos Alcaraz, junto a Vinicius y Rodrygo.

Carlos Alcaraz, junto a Vinicius y Rodrygo. / MMO

A la primera ocasión recuperó el murciano, que reía e interactuaba con el público y en ningún momento dio muestras de nerviosismo. La rápida respuesta del número 2 nubló a Dimitrov, que trataba de animarse pero sabía que enfilaba el abismo. Sin llegar a jugar un mal tenis, no encontraba la manera de hacer daño a su rival. Y acabo diluyéndose, tembló en el saque del 5-5 y entregó el partido a un Alcaraz que suma su 25ª victoria del año y sigue su camino en Madrid.

Próxima parada: la final del año pasado. Vienen curvas. “Va a ser totalmente diferente a la final del año pasado. Zverev está jugando muy bien, hoy ha pasado por encima de Grenier; ya hemos entrenado aquí y me ganó el set. Todo el mundo sabe lo gran jugador que es y los grandes golpes que tiene. Vamos a intentar dominar, como siempre. Tengo ganas de medirme con él”, analizó.

Davidovich funde a Rune de madrugada

No se detuvieron las buenas noticias para el tenis español con la victoria de Alcaraz. En el siguiente turno de la central, Alejandro Davidovich fundió al danés Holger Rune por 7-6(1), 5-7 y 7-6(5), en un tremendo partido que se fue hasta las 3 horas y 5 minutos de duración. Al malagueño, que batió por cuarta vez en su carrera a un top-10 y logra su mejor resultado en el Masters 1000 madrileño, le espera en la cuarta ronda el croata Borna Coric.

Alejandro Davidovich, en su partido ante Rune.

Alejandro Davidovich, en su partido ante Rune. / REUTERS

“Creo que nunca he tenido estas emociones de jugar en casa y de ganar un partido como este, que la gente esté full contigo. Estoy muy contento, se nota que me quieren aquí en España y eso lo aprecio mucho. Los últimos juegos estaba con mucha tensión, había sido un partido largo, con muchas bolas de break. Pero lo he sabido gestionar de una forma u otra y me lo he llevado”, reconoció tras el partido.

Un resultado que permite a Davidovich volver a acercarse a las puertas del top-30, del que salió tras su prematura eliminación en Montecarlo, y que hace que España cuente con tres representantes en octavos de final del cuadro masculino.