Análisis: No es De la Fuente, es España

La 'era De la Fuente' ha arrancado de forma tormentosa. Una derrota y una victoria inflada en los instantes finales antes dos selecciones de nivel medio dejan una fotografía inquietante de esta España que se clasificará para la Eurocopa, pero que no invita al optimismo. La forma en que cayó en Escocia es decepcionante y deja un mal sabor de boca para el estreno del riojano. Aquí van algunas conclusiones sobre lo ocurrido estos días:

LA MEDIOCRIDAD DE ESPAÑA

España ha ganado uno de sus últimos cinco partidos. Solo uno. Y la nómina de rivales no es especialmente aristocrática. Alemania (1-1), Japón (1-2), Marruecos (0-0), Noruega (0-0), Noruega (3-0) y Escocia (0-2). España se ha instalado en la clase media perdiendo la jerarquía que obtuvo entre 2008 y 2012 con la consecución de las Eurocopas y el Mundial. En los 109 partidos que jugó España en su época dorada (2007 a 2014) logró 90 victorias (82%), 11 empates y 8 derrotas. En los 108 partidos que ha jugado desde entonces suma 64 victorias (59%), 27 empates y 17 derrotas. Hoy es un equipo que no domina ninguna de las áreas y que no tiene jugadores dominantes sobre el césped.

DE LA FUENTE COMIENZA MAL

De los últimos diez seleccionadores de España es el que menos partidos ha necesitado para caer derrotado. Ni Clemente (8 partidos), Camacho (23), Sáez (10), Luis Aragonés (26), Del Bosque (14), Luis Enrique (4) cayeron tan pronto como de la Fuente, en su segundo partido. Tampoco Lopetegui, Hierro y Moreno, que no perdieron partidos como seleccionadores. España no perdía un partido de clasificación de Eurocopa desde 2014 (2-1 Eslovaquia). No se quedaba a cero en un partido de clasificación de Eurocopa desde 2006 (2-0 Suecia). Y no perdía un partido por más de un gol de diferencia desde hacía 7 años (2-0 contra Italia en los octavos de final de la Euro 2016). Con De la Fuente se han roto registros vigentes durante muchos años.

SIN ONCE DEFINIDO Y SIN ESTILO

El seleccionador riojano ha querido ver a todos los jugadores de su primera convocatoria y solo tres no han jugado un solo minuto: Zubimendi y los porteros David Raya y Robert Sánchez. Todos los demás han disfrutado de su oportunidad y solo tres han repetido en el once: Kepa en la portería y Rodri y Mikel Merino, en el doble pivote. Un equipo con ocho cambios entre el once de Málaga, ante Noruega, y el de Glasgow. Solo se repitió el dibujo con un 4-2-3-1 claro en el que destacó como novedosa la aparición de un delantero de área como Joselu, el peso de Ceballos como creador en la línea de tres mediapuntas y el trabajo de Rodri. Problemas en los laterales, poca verticalidad en los extremos, defensa con errores groseros y problemas en la salida del balón que provocaban oportunidades del rival. Kepa puede discutir la titularidad de Unai Simón. Después de los dos partidos esta selección no transmite una idea de juego concreta. Ante Noruega salvó el expediente el plan B y con Escocia el equipo se terminó descomponiendo.

SIN PESO DE LOS 'GRANDES'

Barcelona, Real Madrid y Atlético no están contentos con su protagonismo en la nueva selección de De la Fuente. En Escocia se produjo la primera alienación de España sin un jugador del Barcelona en 12 años. En Glasgow dejó fuera a Balde y en el banquillo a Gavi, Nacho, Carvajal y Morata. Solo fue titular un jugador de los tres del equipos 'grandes' de la Liga: Ceballos. Le dio quince minutos a Gavi y un tiempo a Carvajal, por lesión de Porro. Ninguno de los jugadores de Barça, Madrid y Atlético han mostrado un rendimiento que invite a pensar que son titulares indiscutibles, salvo un Ceballos que vuelve a echarse el equipo a la espalda con De la Fuente en el banquillo.

DISPAROS LEJANOS Y CENTRO AL ÁREA

Hacía mucho que España no alineaba un delantero dominante en ataque. Un 9 de área al que centrar balones y cambiar ese fútbol de toque eterno que hipnotizaba a las defensas rivales o aburría a sus propios aficionados. La presencia de Joselu, autor de dos goles en cuatro de minutos ante Noruega, parece haber cambiado el estilo de España. Los dos goles del delantero 'perico' ante Noruega fueron remates de primeras, y frente a Escocia remató de cabeza al larguero y tuvo testarazo que le salió más centrado. Además de las llegadas por fuera de Gayá y Porro al área para el 9, también se vieron disparos lejanos que hicieron trabajar al portero local. Es una España más afilada, más vertical y con una pegada más pesada.

SIN LIDERAZGO NI ESTRELLAS EN LAS ÁREAS

España alineó ante Escocia un once con 155 internacionalidades, menos por ejemplo que las de Busquets o las de Sergio Ramos. Se sabía que De la Fuente iba a apostar por un cambio de ciclo y gente más joven. Un grupo que conoce bien, pero esta España perdió en Glasgow dejando sensaciones inquietantes. En la segunda parte, después del segundo gol, no tuvo personalidad ni carácter para irse a por Escocia. No hay jugadores que se echen a la espalda el equipo ni futbolistas que sepan marcar el tempo del partido. España cayó en Hampden Park evidenciando que la solución es que el grupo crezca como equipo porque no hay futbolistas de peso. Algo que se sabía y que estos dos primeros partidos de la era De la Fuente confirman: no hay líderes en esta selección. Veremos si se pueden forjar.

DISCURSO NAIF DEL SELECCIONADOR

El discurso de De la Fuente tras la derrota fue naif, sin autocrítica y sin realizar un análisis profundo de la derrota: “No me muevo ni un centímetro de la idea que traslado a los jugadores. Derrota dolorosa. Analizando el partido en estos primeros minutos uno piensa que hemos hecho cosas bien, suficientes para haber tenido otro resultado y meternos en el partido. Me quedo con esas cosas positivas, hay que mejorar mucho y estoy encantado con la actitud de los jugadores. Hemos intentado todo lo ensayado pero no ha salido. Hay que valorar que al alto nivel cualquier error te penaliza. Han sido dos accidentes del juego, no hay un pero ni un reproche a los jugadores y esto debe servir de aprendizaje. El primer tiempo ha mostrado en gran medida todo lo que hemos trabajado”.