SUPERBOWL | EAGLES - CHIEFS (L / 0:30)

Mahomes y Hurts, 'poder negro' en la primera Super Bowl con dos 'quarterbacks' afroamericanos

Los grandes protagonistas de la final de la NFL derriban la última barrera y son herederos de una lucha por la igualdad racial que iniciaron hombres como Doug Williams

Durante años, a los jugadores negros se les relegaba a roles menos creativos donde primaba la capacidad física: "Se sentían inferiores y alejados del liderazgo"

Jalen Hurts y Patrick Mahomes, 'quarterbacks' de los Philadelphia Eagles y Kansas City Chiefs.

Jalen Hurts y Patrick Mahomes, 'quarterbacks' de los Philadelphia Eagles y Kansas City Chiefs. / CAITLIN O'HARA / REUTERS

Denís Iglesias

Denís Iglesias

La Super Bowl LVII, que enfrenta en la madrugada del domingo al lunes (00:30) a los Philadelphia Eagles y los Kansas City Chiefs, romperá todas las barreras. El evento de la temporada del deporte norteamericano ya es un acontecimiento planetario que moviliza audiencias de más de 114 millones espectadores. Este poder de convocatoria otorga a la NFL una facultad de cambio social que en esta edición plasman Patrick Mahomes y Jalen Hurts, 'quarterbacks' de los finalistas Chiefs y los Eagles, respectivamente. 

Por primera vez desde que se celebra la Super Bowl (la inaugural fue en 1967), la posición capital en ambos equipos de la final estará defendida por dos afroamericanos. Es algo de lo que saca pecho la propia competición. Lo puso en valor en la rueda de prensa de los dos protagonistas que orientarán el éxito de sus equipos. "Hay que destacar este hecho histórico, porque es un hito tras un largo camino. Apenas siete quarterbacks negros han jugado la Super Bowl (ocho con él)", destacó Hurts.

'MARISCALES' REVOLUCIONARIOS

La referencia señala en primer lugar a Doug Williams, pionero y campeón con Washington (1988). Después vinieron Steve McNair (Titans, 2000), Donovan McNabb (Eagles, 2005) y Colin Kaepernick (49ers, 2013), titulares, pero que no pudieron levantar el trofeo. En 2014, Russell Wilson guió a los Seahawks a lo más alto y se quedó al borde en 2015. Tampoco pudo coronar su obra 'Cam' Newton con los Panthers en 2016. Pero si hay un hombre que ha reescrito la historia es Patrick Mahomes, que sumará su tercera Super Bowl tras vencer en la de 2020 (49ers) frente y caer derrotado en la de 2021 (Tampa).

Además, acaba de ser nombrado MVP de la temporada, algo contraproducente, según la historia reciente de los últimos que han recibido este galardón. "Si podemos mantener el nivel de modo constante, abriremos las puertas para que otros niños crezcan y persigan sus sueños de convertirse en quarterbacks", apuntó en el acto previo al evento del año un Mahomes que ha cambiado este deporte.

El impacto del de Tyler desde que llegó a la NFL en 2017 (elegido en el draft en primera ronda en la décima selección) es equiparable al conseguido por Stephen Curry en la NBA o al de Messi en el fútbol. Un jugador indefendible que lee más allá de las tácticas prediseñadas y con una inventiva fuera de lo común en cualquier contexto.

Precisamente, esto contradice uno de los lastres históricos con los que han cargado los jugadores afroamericanos, definidos como "atléticos" o "bestias físicas", pero nunca con atributos como la inteligencia que se utilizaban para sus homólogos blancos. "Los negros se sentían inferiores, alejados de las posiciones de liderazgo, y se les consideraba solamente aptos para ser running back, cornerback o wide receiver. Aunque fueran 'quarterbacks' en el fútbol universitario, cuando llegaban a la NFL se veían forzados a cambiar de lugar", cuenta Jason Reid, periodista de la ESPN y autor del libro Rise of the Black Quarterback: What It Means for America

CONTEXTO FAVORABLE

Las desigualdades, por supuesto, también afectaban a las remuneraciones. Doug Williams, primer mariscal de campo negro en ser titular y ganar una Super Bowl (con los Redskins en 1988), fue durante años el peor pagado en su posición. Sobre Hurts pesaban además dudas acerca de su capacidad en la mecánica de pase, clave en los mariscales.

Sin embargo, es algo que ha conseguido mejorar hasta convertirse en un gran pasador, siendo una triple amenaza para las defensas rivales. Puede asistir, es un jugador con una gran carrera y se asocia a la perfección con el running back (Miles Sanders, Boston Scott o Kenneth Gainwell). "Es como tener a Michael Jordan ahí fuera. Es tu líder", afirmaba Nick Sirianni, entrenador de los Eagles, después del primer partido de los playoffs.

Para este head coach, la Super Bowl es una factura pendiente con Andy Reid, su homólogo de los Chiefs, quien lo despidió cuando estaba empezando su carrera. El veterano preparador también puso en valor a la dupla Mahomes - Hurts.

"Los jugadores negros nunca han tenido un contexto tan favorable para ser quarterbacks. Estos muchachos son los emblemas de sus franquicias, tienen acuerdos de patrocinio masivos y son un ejemplo para muchos", defendió Reid, quien calmó a los seguidores de los Chiefs. 

'BLACK LIVES MATTER'

"Mahomes está completamente recuperado de su lesión de tobillo", indicó sobre la lesión en el tobillo que arrastraba desde el partido contra los Jacksonville Jaguars que a punto estuvo de frustrar el primer duelo entre quarterbacks negros, para los que las últimas temporadas han sido de récord.

En 2022 hubo hasta 21 afroamericanos desempeñando esta posición y en 15 de los 32 equipos de la NFL fueron titulares en algún partido, según datos de Football Perspective

Conquistas labradas a base de esfuerzo en una competición criticada por Kaepernick, precisamente un quarterback negro, por el trato recibido tras secundar las protestas de Black Lives Matter. Esto provocó el rechazo de Rihanna a ser cabeza de cartel del half time show en 2019, algo que sí hará en esta edición tras una larga negociación. Más brillo afroamericano para un evento que, aunque con un retraso histórico, otorga el protagonismo perdido a los que durante décadas permanecieron alejados de los focos.