Gedeón Guardiola: "Nuestra fuerza es que nadie es imprescindible en España"

A sus 38 años, Gedeón Guardiola luce orgulloso el brazalete de capitán de los Hispanos. El alicantino, que acumula más de 170 partidos con España, conversa desde Polonia con EL PERIÓDICO DE ESPAÑA horas antes de medirse a Dinamarca (esta tarde 18:00 horas) en la semifinal del Mundial de balonmano.

¿Cómo vivieron desde dentro la increíble victoria ante Noruega? 

Fue un partido muy intenso y la verdad es que nos quedamos vacíos tras liberar toda la adrenalina. Creo que la forma en que logramos la clasificación retrata muy bien lo que se vive dentro del equipo y la forma en que entendemos el balonmano. 

Desde fuera dio la sensación de ser un partido duro porque Noruega dominó el marcador. 

Sabíamos que había que trabajar bien la defensa y en ese aspecto estamos satisfechos. Ellos estaban por encima de los 30 goles y logramos que se quedaran en 25 en los 60 minutos. Donde no estuvimos tan acertados fue en ataque, que nos costó y fallamos tres penaltis, algo poco habitual en nosotros.

¿Preferían a Noruega o a Alemania en cuartos? 

A estas alturas de la competición nos conocemos de sobra todos. Por nuestra forma de competir nos daba igual Alemania o Noruega. España sale siempre a ganar los partidos y no se preocupa más de los rivales que de su juego. Evidentemente hay un trabajo sobre el adversario, pero la prioridad es imponer nuestro juego. No perdemos el tiempo en cábalas. Si quieres colgarte el oro vas a tener que ganar a todo el rival que se cruza.

Tienen jugadores como Gonzalo Pérez de Vargas o los Dujshebaev, pero todos los rivales ensalzan su fuerza como "equipo".  

Gonzalo estuvo fantástico con Noruega, pero nuestra fuerza es que no hay nadie imprescindible. Si no está Gonzalo, aparece Rodrigo. Tenemos pivotes muy diferentes, pero muy competitivos que le dan mucho al equipo. Los extremos mantienen una competencia sana de la que se beneficia el grupo. Tenemos mucha profundidad de banquillo y sí, somos un equipo.

Un equipo que nunca se rinde... 

Ante Noruega dejamos claro que quien quiera ganar a España tendrá que sudar mucho. Nunca nos damos por vencidos y no bajamos los brazos jamás. Es el ADN de este grupo.

Quería preguntarle también por la riqueza táctica que aporta Jordi Ribera. Ante Noruega hubo un rato que doblaron el pivote y los escandinavos no fueron capaces de desactivar esos ataques. 

Detrás de esa riqueza hay muchas horas de vídeo y análisis por parte de Jordi y de su equipo técnico. Y muchas horas de pista con los jugadores para luego poder aplicarlo durante los partidos.

A sus 38 años ya le habrán preguntado por el relevo generacional muchas veces. 

Creo que una de las claves del éxito de esta selección es que Jordi ha apostado por un relevo generacional del grupo más sostenido, no algo radical como en otras selecciones donde lo están sufriendo. Han dado minutos a jugadores más jóvenes en torneos previos y ahora están integrados con normalidad y asumen responsabilidades. No somos 14, somos 25 o 30. Es un vestuario con gente de diferentes generaciones, mucho talento y un gran ambiente. 

Dinamarca llega más descansada tras un partido cómodo ante Hungría, mientras ustedes jugaban 80 minutos con Noruega. 

El desgaste ante Noruega es innegable, pero la semifinal está al 50 por ciento porque los daneses han viajado desde Suecia a Gdansk para la semifinal. No hay excusas. 

¿Qué espera de los daneses? 

Ofensivamente tienen muchos recursos con jugadores de primer nivel mundial. En defensa son muy compactos y qué te voy a decir de sus porteros. Pero llegamos tras ganar a Noruega de una forma que ha disparado la moral del equipo. 

¿La defensa sigue dando títulos a estos niveles? 

Estoy convencido de ello. Cuando combinas dos buenas defensas, eso te permite correr y marcar fácil. Y encima generas incertidumbre en el rival cuando ataca.  

¿Llegan en su mejor momento de juego a estas semifinales? 

Vamos de menos a más durante los torneos y para mi es un acierto esa estrategia. En este Mundial cogimos velocidad de crucero ante Eslovenia. El mejor no sé, pero creo que la semifinal con Dinamarca llega en el momento perfecto. 

¿Se ve en la final del domingo? 

Desde el primer día. A eso hemos venido.