TENIS

El paso final de Nadal en Roland Garros

El duelo contra Casper Ruud, que estuvo en la Academia del mallorquín, arranca a las 15.00 horas (TDT Discovery Max, en abierto y Eurosport)

Rafa Nadal.

Rafa Nadal. / EFE

Jaume Pujol-Galceran

"Vamos rizando el rizo", bromeaba Carlos Moyà ante el último paso de Rafael Nadal en busca de su 14 título en Roland Garros y el 22 Grand Slam. El entrenador y amigo del 13 veces campeón del torneo lo decía después de la agobiante semifinal jugada el día anterior ante Alexander Zverev. Lo pasó mal como pocas veces, admitía. "Siempre soy positivo pero esta vez no las tenía todas conmigo. Rafa tuvo un bajón físico y sufrimos porque veíamos que sufría".

El exnúmero 1 mundial hablaba con la prensa española, poco después de finalizar el entrenamiento de Nadal en la pista número 7. Poco más de una hora y media, bajo el sol a 27 grados, tiempo que no será el mismo con el pronóstico de un 80% de lluvia, que volverá a obligar a cerrar el techo de la Philippe Chatrier.

En la pista, peloteando con Nadal, estaban el propio Moyà, Francis Roig y Marc López, bajo la atenta mirada el doctor Ángel Ruiz Cotorro y el recuperador físico Rafael Maymó. Todos pendientes de los movimientos del tenista igual que las casi 3.800 personas que llenaban la coqueta pista y aplaudían a rabiar cualquier golpe de su ídolo.

Zverev, ligamentos rotos

A 24 horas de volver a la Philippe Chatrier (15.00 horas, TDT Discovery Max, en abierto y Eurosport), Nadal se movía bien. Parecía recuperado del esfuerzo de los últimos días. No solo de las semifinales ante Zverev (3 horas y 5 minutos), sino de los duros partidos anteriores con Novak Djokovic (4 horas y 11 minutos) y Felix Auger-Aliassime (4 horas y 23 minutos), en solo siete días.

"Jugar la final contra Rafa en Roland Garros es seguramente el mayor reto de este deporte. Ya ha ganado 13 veces, parece absolutamente imposible ganarle, pero lo intentaré como los otros 13 antes que yo intentaron hacerlo"

Casper Ruud

Moyà explicó que Nadal sufrió "un bajón físico" y que las sensaciones "eran raras" en el partido con Zverev. "Un rival un tanto irregular pero que, cuando está fino, es muy difícil porque no te deja hacer muchas cosas. Rafa tuvo que tirar de épica en el primer set y después pasó lo que pasó", explicaba.

El tenista alemán, que este sábado marchó en avión privado fletado por Roland Garros a Montecarlo, explicó en las redes sociales que se había roto los ligamentos del tobillo derecho. Una lesión que le dejará fuera de combate al menos hasta Wimbledon. Desde Instagram Zverev tuvo un mensaje para Nadal al que felicitó por su victoria. "Es increíble para Rafa su decimocuarta final. Espero que pueda culminar el camino y seguir haciendo más historia", dijo.

"Nadal es Nadal y esto es Roland Garros", valoraba Moyà a la hora de analizar la final. "Cada partido que salva es como una transformación en un nuevo jugador. Lesión aparte, el hecho de llegar a la situación en que llegó y con el juego que está haciendo, nos da confianza en que puede superar las adversidades y está preparado para ello".

El mayor reto de Ruud

El propio Casper Ruud sabía lo que les espera en la Philippe Chatrier. "Jugar la final contra Rafa en Roland Garros es seguramente el mayor reto de este deporte. Ya ha ganado 13 veces, parece absolutamente imposible ganarle, pero lo intentaré como los otros 13 antes que yo intentaron hacerlo", decía el tenista noruego, número 8 mundial, que jugará su primera final de un Grand Slam. "No tengo nada que perder", insistía tras ganar a Marin Cilic en semifinales.  

"Ruud es el jugador más terrícola del circuito. Temo la confianza con la que está", apuntaba prudente Moyà.  La evolución del tenista noruego, de 23 años, ha sido grande en poco más de tres años.

El orgullo de Toni Nadal

"Llegó a Manacor que estaba 140-150 y hoy en día es uno de los mejores del mundo. Él y su padre han hecho un trabajo extraordinario y nos sentimos orgullosos de colaborar con ellos", decía Toni Nadal, feliz porque un jugador de su academia llegase a la final. 

Eso si, el tío de Nadal no ocultaba sus sentimientos. "Si hay que perder con uno, mejor perder con Casper y si Casper tiene que perder, mejor que sea con Rafa porque ya él dijo en su momento que Rafael, cuando era niño era su ídolo".