FC Barcelona

El "diagnóstico" más sincero de Xavi

"Tenemos jugadores que no son pulcros, somos lo que somos ahora mismo", confesó el técnico

Xavi Hernández.

Xavi Hernández. / EFE

En Sevilla, Xavi estuvo frustrado. Frustrado y aliviado porque el Barça, como confesó él mismo, se "había quitado un peso de encima" al situarse, ya de forma matemática, entre los cuatro primeros, lo que le abre la puerta de la Champions de la próxima temporada, "un objetivo mínimo y exigible".

Frustrado, aliviado y, al final, reflexivo. Era el técnico consciente, una vez derrotado el Betis en el último suspiro, y no es ninguna exageración, con el zurdazo de Jordi Alba que le toca pilotar la reconstrucción de una plantilla que se ha hecho tan mayor como escasamente competitiva, donde un título en tres años (la Copa del Rey del Barça de Messi y Koeman), revelan la caída hacia el abismo.

Xavi sabe, mejor que nadie, dónde está. Y, sobre todo, sabe lo qué necesita para devolver al equipo a la senda del éxito. No hizo falta que se le preguntara, acusando, de forma inesperada, a determinados futbolistas. No dio nombres. Quiso ser elegante. Pero se le entendía todo. "Tenemos jugadores que no son pulcros, somos lo que somos ahora mismo", confesó el técnico.

"Podía haber sido una temporada peor, mucho peor"

Era la versión ‘xaviniana’ del "esto es lo que hay" que popularizó Koeman, unidos ambos entrenadores por el mismo "diagnóstico" sobre una plantilla que ha perdido vigor competitivo. Hace años que al Barça no le alcanza para ganar títulos. Ni en los años finales con Messi. Ni en el año uno sin Messi, por mucho que Xavi haya impulsado al equipo del noveno lugar al segundo.

Con los 4 fichajes invernales no bastó

"Podía haber sido una temporada peor, mucho peor", dijo en Sevilla tras repetir en varias ocasiones, sin que hubiera siquiera necesidad de preguntárselo, de que había sorteado un escenario terrorífico cuando entró en el club "en noviembre", por lo que reclamó de forma urgente la llegada de cuatro fichajes invernales (Alves, Ferran, 55 millones más 11 en variables, Aubameyang y Adama).

Con ellos ha reaccionado a tiempo en la Liga, sobrándole incluso hasta tres jornada. Pero con ellos, que aparecieron tras la eliminación de Champions, ha perdido Supercopa de España, Copa de Rey y Europa League. No han sido suficientes.

Todo en el aire

Xavi indicó que ha sabido "cambiar la mentalidad del equipo", dotándole de "alma ganadora", pero no basta, por mucho que su Barça "haya ganado a los 10 primeros clasificados de la Liga". Por eso, tiene un plan para la reconstrucción, tras comprobar que "el excelente nivel de juego de febrero y marzo" se ha derrumbado en un abril trágico.

Un plan para regenerar la plantilla, aunque no todo depende de él. "Hemos tenido un bajón, no jugamos como antes", admitió el técnico. "Pero tenemos el diagnóstico. Sabemos qué nos falta, qué nos pasa. Somos inconstantes y no nos da para títulos".

Lo sabe Xavi. Lo sabe Laporta. Y lo saben Mateu Alemany, director de fútbol, y Jordi Cruyff, miembro de la secretaría técnica, los encargados de ejecutar los deseos del entrenador en el mercado veraniego. Pero ni ellos mismos saben si podrán satisfacerle porque todo está en el aire. Desconocen si hay dinero ("hay un plan A, plan B, plan C...", dijo Jordi) y si hay fair play para inscribirlos. El diagnóstico está hecho. La solución, no