PREMIER LEAGUE

Así funciona el City Football Group, el imperio construido alrededor del Manchester City

El mayor 'holding' futbolístico del mundo posee la propiedad total o parcial de 11 clubes repartidos por todos los continentes salvo África, entre ellos el Girona

El objetivo es expandir la marca comercial del equipo propiedad de Emiratos Árabes Unidos y ampliar su capacidad de captar nuevos talentos en diferentes mercados

Las entidades filiales comparten conocimiento y recursos entre ellas y con la matriz, en la que además se apoyan para incrementar sus acuerdos comerciales

Los clubes del City Football Group.

Los clubes del City Football Group.

Sergio R. Viñas

Sergio R. Viñas

Se abre el telón y aparecen reunidos en una mesa en Manchester un inglés, un español, un francés, un belga, un neerlandés, un estadounidense, un uruguayo, un chino, un japonés, un indio, un australiano y al lado de todos ellos un boliviano. ¿Cómo se llama la película? City Football Group.

Ese telón, se abre no menos de tres veces al año, cuando los ejecutivos de 11 clubes de todo el mundo se reúnen en la 'casa madre' para compartir conocimientos y diseñar estrategias comunes en diferentes áreas: deportiva, financiera, comunicativa, comercial...

Las llaman 'meeting weeks' (semanas de reuniones) y las organiza el Manchester City para estimular la relación con los clubes que forman parte del mayor 'holding' futbolístico del mundo, creado a su imagen y semejanza, con un doble objetivo: expandir su marca comercial en mercados estratégicos y generar una amplia red internacional para el reclutamiento y formación de talentos.

Un imperio de clubes

El City Football Group ya es todo un imperio con posesiones en cinco continentes, con sede en Manchester, alimentado por capital de Emiratos Árabes Unidos y cincelado por un español, Ferran Soriano, director ejecutivo del City y antigua mando derecha de Joan Laporta durante su primera etapa como presidente del FC Barcelona.

Khaldoon Al Mubarak y Ferran Soriano, presidente y director ejecutivo del Manchester City.

Khaldoon Al Mubarak y Ferran Soriano, presidente y director ejecutivo del Manchester City. / Reuters

Soriano accedió a su actual puesto en 2012, cuatro años después de que el jeque Mansour bin Zayed Al Nahyan adquiriera la propiedad del Manchester City. A nivel deportivo, su cometido fue replicar el modelo exitoso del Barça de Pep Guardiola y a nivel comercial el de expandir la marca del club 'citizen' por todo el mundo para potenciar la generación de ingresos de la entidad.

Los 13 clubes

Su primera decisión fue atacar el mercado estadounidense, en plena expansión futbolística, con la creación del New York City. El siguiente objetivo fue Australia, comprando el Melbourne Heart y rebautizándolo como Melbourne City. En Japón se alió con Nissan para adquirir una participación del Yokohama Marinos y en España lo hizo con Pere Guardiola para adquirir la mayoría accionarial del Girona Fútbol Club.

Con el paso de los años fue desembarcando también, con diferentes porcentajes de participación en Uruguay (Montevideo City Torque), India (Mumbai City Club), China (Sichuan Jiuniu), Francia (Troyes AC), Bélgica, (Lommel SK) en Países Bajos, (NAC Breda) en Italia (Palermo) y en Brasil (Bahía)

La otra pata de la galaxia es el Club Bolívar, propiedad del empresario Marcelo Claure, con el que comparte accionariado en el Girona. El City Group no forma parte del capital de la entidad boliviana, pero sí tiene un acuerdo de colaboración con ella.

El Manchester City ha dado una nueva y gigantesca dimensión a los 'holdings' futbolísticos internacionales, pero ni mucho menos los ha inventado. Ahí está el Atlético de Madrid, nacido como una sucursal madrileña del Athletic Club hace 118 años y accionista mayoritario del Atlético San Luis mexicano desde 2017.

Como ejemplos más recientes, y ya con mayor vocación empresarial y global, aparecen los clubes de la familia Pozzo (Udinese, Watford y, hasta hace unos años, Granada) y sobre todo la red de clubes de la marca de bebidas energéticas Red Bull, con franquicias en Salzburgo, Leipzig, Nueva York y Sao Paulo.

Relación vertical

Formalmente, el Manchester City es solo un club más de todo el conglomerado, pero en la práctica ejerce como matriz de todos los demás, con los que desarrolla una relación vertical de intercambio de recursos y conocimientos que va desde lo más obvio, como las cesiones de futbolistas, hasta acuerdos comerciales que abarcan a todo el grupo.

Pedro Alcalá y Leroy Sané durante un partido entre el Manchester City y Girona en el verano de 2017.

Pedro Alcalá y Leroy Sané durante un partido entre el Manchester City y Girona en el verano de 2017. / Robin Townsend

Un ejemplo claro es el patrocinio de Puma, que en 2019 alcanzó un acuerdo global durante diez años para vestir a los clubes del City Football Group por 700 millones de euros. Nissan, accionista mayoritario del Yokohama Marinos, también extendió su relación comercial a los clubes que forman parte del 'holding'. Acuerdos, en ambos casos, que impactan positivamente en los resultados de los 'clubes satélite' por la tracción comercial del club de Manchester.

En materia futbolística, el Manchester City ha desarrollado una red de ojeadores por todo el mundo de la que se aprovechan el resto de clubes, así como del conocimiento adquirido en 'big data' a lo largo de los años. Las nuevas normativas derivadas del Brexit y la prohibición de que menores de 18 años sean traspasados internacionalmente multiplica la potencial utilidad de los otros diez clubes como granero de chavales que legalmente no pueden sumarse todavía a la cantera 'citizen'.

Rentabilidad

La tarea pendiente del 'holding' es convertirse en un negocio económicamente rentable, un objetivo que el City Group sitúa a largo plazo. Las cuentas de la sociedad, depositadas en la Companies House de Reino Unido, el equivalente al Registro Mercantil español, muestran que el grupo nunca ha cerrado un ejercicio con beneficios, encadenando pérdidas que van desde los 84 millones de libras (2018-19) a los 20,5 (2019-20).

La cifra de negocio, no obstante, no ha dejado de crecer, merced a las adquisiciones que han ido realizando. A excepción del primer curso en pandemia, los ingresos han experimentado un volumen de ingresos en constante crecimiento, alcanzando los 634 millones de libras en el último ejercicio.

Accionariado

La necesidad de ir aumentando su capital llevo a los dueños del Manchester City a ir buscando socios para el City Football Group. Abu Dhabi United Group (propietario del 77% del 'holding' en la actualidad), vendió un 13% de la masa accionarial a China Media Capital Consortium por 400 millones de dólares en 2015 y otro 10% al fondo Silver Lake en 2019, a cambio de 500 millones de dólares. La valoración del grupo en ese momento ascendía, por tanto, a 4.800 millones de dólares.

Del mismo modo, el grupo va realizando ampliaciones de capital en las filiales que lo necesitan. Un ejemplo claro es el del Girona, que recibió una inyección de 20 millones de euros en un contexto de caída generalizada de ingresos por la pandemia, para consolidar un proyecto ambicioso.

Porque la pujanza deportiva de los equipos también es un objetivo del City Group. De hecho, cuatro de los 11 clubes ganaron su liga de Primera División el año pasado, otros tres quedaron entre los cinco primeros y el Girona, recién ascendido, se quedó a cuatro puntos de Europa. Un modelo de éxito al que solo le resta alcanzar su equilibrio económico.