MÚSICA

¿Quién debe ganar el Benidorm Fest 2025? El artista que necesita España en Eurovisión no está entre los más escuchados

Aunque los ojos están puestos sobre Melody y Lachispa, salvo sorpresa, a falta de conocer sus escenografías, ninguna tendría opciones en Europa

Las tres canciones que deberían ganar el Benidorm Fest (y representar a España en Eurovisión)

Pedro del Corral / Raquel Serrano

Pedro del Corral

Pedro del Corral

Madrid

Eurovisión premia la autenticidad. Por ello, quienes dicen que sólo llevando a una Chanel 2.0 España ganaría se equivocan. SloMo ya fue y nos devolvió a un podio que nos pisábamos desde 1995. No obstante, repetir la fórmula nos lastraría. El público está deseoso de canciones que les pellizquen y no que les recuerden a otras. Por suerte, este año, el Benidorm Fest ha optado por 16 propuestas que se alejan de aquella órbita. ¿Mejores? La audiencia dictará sentencia. Por el momento, a ciegas, a un día de verlas en directo, hay una con bastante potencial.

Desde la publicación de los temas el pasado diciembre, una batalla se ha impuesto en las redes sociales: Melody vs. Lachispa. Ambas artistas son las más escuchadas de la edición, con más de un millón de reproducciones cada una. Además, las casas de apuestas les dan la victoria de calle. Nadie parece hacerles sombra. Su potencia vocal es irrefutable, de ahí que los ojos estén puestos en la escenografía. Ahora bien, ¿podrían sus canciones hacer un buen papel en Europa? No está claro.

En el análisis que EL PERIÓDICO DE ESPAÑA publicó el 2 de enero, Melody no salía bien parada. “Si hubiese defendido Esa diva en 2009 en vez de Amante de la luna, habría arrebatado la plaza a Soraya Arnelas. Su candidatura hubiese tenido sentido hace 15 años, hoy sólo arrastra el apoyo de quien no la vio coronándose entonces. Por ello, precisamente, no es descartable su victoria. Sin embargo, a pesar de ser un animal escénico, su tema resulta tan irrelevante como Bloody Mary (España, 2006), Hero (Suecia, 2008) y Breathe (Montenegro, 2022)”.

Respecto a Lachispa, a falta de ver el pack completo, el paisaje era otro bien distinto: “Despierta algo a primera escucha, un punto esencial en Eurovisión. Se trata de una saeta pop con tintineos electrónicos que, si cuenta con una puesta en escena de altura, podría llevarse el Micrófono de Bronce con holgura. Hartita de llorar concentra la garra de Wild Dances (Ucrania, 2004), la vanguardia de Eaea (España, 2023) y el hipnotismo de The Code (Suiza, 2024). Una tormenta de emociones que, en la dosis justa, podría arrasar. Rosalía votaría por ella”.

Quién podría ganar el Benidorm Fest

Dicho esto, salvo sorpresa, por ahora ninguna daría juego en el Viejo Continente. La victoria que Massiel (1968) y Salomé (1969) nos dieron no llevará su firma. Tampoco la del resto de concursantes. En esta ocasión, España no cuenta con un caballo ganador. Lo que no quiere decir que su presencia vaya a ser intrascendente: Carla Frigo y Celine Van Heel, por ejemplo, podrían dejar huella, en el buen y en el mal sentido. Pues aquí, ojo, de lo que se trata es de no pasar desapercibido. Como, tristemente, le ocurrió a Amaia y Alfred (2018), Miki Nuñez (2019) y Blas Cantó (2021).

David Afonso, Henry Semler, Lucas Bun, Mawot, Kuve, Mel Ömana y Sonia y Selena, probablemente, no pasen a la final del próximo sábado. No porque sus canciones sean peores, sino por no haber despertado el fervor que se le presupone a una ganadora. Si aquí no lo han logrado, en Suiza aún menos. Destaca Chica Sobresalto, de las pocas con un tema real, con alma. No suena prefabricada ni superficial. Podría ser un sencillo de su próximo álbum, lo que le da autoridad. buena, sí; competitiva, nada. Siguiente.

La nueva 'Nochentera'

Daniela Blasco tiene entre manos la única candidatura de corte internacional. No suena manida, a pesar de aunar elementos que ya han asaltado el festival. Será una gran apuesta si, en directo, afina y no se ahoga. Se medirá con J Kbello, la mejor opción hasta la fecha. Aunque no está entre los más demandados de la edición, es el único que puede garantizar un buen puesto. A día de hoy, VIP es la sexta canción más escuchada en Spotify con 500.000 reproducciones. En YouTube, por su parte, ocupa la misma plaza con 235.000 visualizaciones.

¿Qué tiene de especial? De latido urbano y venada quinqui, es hija de su tiempo: actitud, sonido y discurso. Al artista sólo le falta ajustar el tiro para hacer de ella un disparo efectivo. Pues no hay que olvidar que, en un festival tan feroz, no vence la mejor canción, sino el paquete perfecto. No hay que perder de vista a K!ngdom, responsables de la nueva Nochentera. Su Me gustas tú tiene ínfulas de himno: es pegadizo y desprejuiciado, ideal para viralizarse. Asimismo, DeTeresa no defraudará: los giros folclóricos que salpican La pena ya no asombran como antes, pero tampoco decepcionan.