ENTREVISTA

Cazzu, la matriarca del trap argentino: "Lo esencial era que las mujeres tuvieran un lugar seguro"

La gran referente de la escena urbana de su país luchó contra todo para "limpiar" un terreno en el que han crecido numerosas jóvenes artistas como Nicky Nicole o María Becerra

La artista argentina Cazzu, antes de la entrevista con este diario.

La artista argentina Cazzu, antes de la entrevista con este diario.

Hay una jovencísima generación de artistas argentinas que tuvo suerte de que Cazzu estuviera antes que ellas. Abrió paso y les indicó el camino con amor casi maternal. La artista fue y es un poderoso referente femenino de la ahora popularísima escena urbana de su país, Argentina, de la que ella es una parte indispensable para entener su magnitud actual. De eso dan fe estrellas como Nicky Nicole y María Becerra, entre otras.

"Ojalá hubiese sido más fácil, pero alguien tenía que limpiar el terreno. Agradezco haber sido yo, porque me imagino personas más frágiles en mí lugar... ¡Imagínate! Si a mí me dañó ser la primera...", comenta Cazzu (Julieta Emilia Cazzuchelli, 28 años) con este diario. "Siempre me interesó de alguna forma protegerlas. No es fácil la rapidez con la que les pasó. No es fácil tener tantos colegas varones. No es fácil", añade.

No fue fácil tampoco para la ola del trap argentino abrirse paso en un país que vivía de rock y cumbia. Los prejuicios asaltaron a todos los pioneros -un movimiento iniciado en las plazas, en las batallas de freestyle- de una manera parecida a la que sucedió en España algunos años antes. Escenas paralelas que ahora se cruzan y que tienen que ver con la necesidad de gritar de generaciones que se encontraron con un presente oscuro y un futuro directamente negro. "Cuando menos herramientas hay, uno se vuelve más creativo. Si esto pasó en España, que sois el primer mundo... Nosotros somos el tercero y cada vez estamos peor", expone.

Más difícil todavía fue para una mujer, y Cazzu siempre ha luchado para que las 'nuevas' anden por tierra firme. "Lo esencial era que las mujeres tuvieran un lugar seguro", apunta la artista centrada siempre en su objetivo de empoderar desde los hechos y el discurso.

Más allá de las críticas al estilo, ella también tuvo que bregar con la presión estética de ser una mujer artista que decidió enfrentarse a los cánones. Abundantes tatuajes en su cuerpo, cambios de look constantes, extravagancia... "Yo nací con un cuerpo como sumamente aceptado socialmente, pero estéticamente siempre fui una persona a la que le gustó lo raro, lo extravagante. Y me siento orgullosa de haber propuesto algo estético que no tiene que ver exactamente con ser linda y bella. Es súper difícil estar en un medio como el que estamos nosotras y no flaquear frente a las presiones estéticas", sentencia.

La jefa

En sus inicios Cazzu hacía cumbia, pasó al reguetón y despuntó con el trap. "El negocio de la cumbia siempre fue muy oscuro. Entonces dije 'vale, a la mierda todo, voy a hacer los géneros que realmente me gustan sin importar si funcionan o no'", apunta. Y ahora tiene una sólida carrera que despegó con Loca (2018), tema con dos de los pioneros de la escena urbana argentina Khea y Duki. Muchas veces se ha visto en esta situación: la de ser la única mujer en una canción con varios artistas. "Yo soy una persona muy poco paciente cuando se trata de un hombre irrespetuoso", desliza.

A Cazzu la apodaron rápidamente la jefa del trap, alias con el que se siente cómoda, y con poco que hayan estado ustedes atentos habrán visto el porqué"Venía luchando en ese momento para que no me llamaran la reina. ¿Alguna hace algo bien y ya tiene que se la reina, no?", pregunta. En su último álbum, Nena trampa, hay una canción llamada, precisamente, Jefa que resume perfectamente lo que es Cazzu: "La jefa de toda la cuadra; sin miedo ni pena sigo empoderando; lo mío e' por las mala'; si no hay acuerdo hay bala".