Opinión | STRANGER THINGS

La madre de Vecna

Margaret Weis creó el universo de ‘Dragones y mazmorras’, un juego de rol que inspira la última entrega de ‘Stranger Things’, estrenada hace pocos días en Netflix

Millie Bobby Brown (Once) y Matthew Modine (el Dr. Brenner) en ’Stranger things’.

Millie Bobby Brown (Once) y Matthew Modine (el Dr. Brenner) en ’Stranger things’.

Si alguien tuviera alguna curiosidad por saber cómo y por qué se eligen los temas a tratar en cada uno de estos artículos semanales -es de suponer que nadie y ninguna, pero nos viene bien para el arranque de hoy- se le podría explicar que se hace sin ningún criterio fijo, unas veces al dictado de la actualidad, otros por mero capricho, y casi siempre, a la trágala. El de hoy es uno de esos artículos caprichosos, surgido de una conversación intrascendental con un compañero que podría resolverlo con más conocimiento e incluso con brillantez, pero, desafortunadamente para los lectores, anda enredado en sus propios quehaceres, que no son pocos, y tendrán que conformarse con estas líneas, o pasarlas de largo.

Después de tanto preámbulo, al grano. Andábamos un día de estos charlando sobre el arranque de la cuarta temporada de Stranger Things. El 1 de julio, no lo habrán olvidado porque fue hace unos días, se estrenó la segunda parte en Netflix. Y no es desvelar gran cosa contar que en esta nueva trama tiene un papel trascendental el club "Fuego infernal", del que forman parte varios de los personajes de la serie, enganchados a uno de los primeros y más populares juegos de rol, Dragones y mazmorras, y que Vecna, el malvado de esta entrega, está sacado de ese universo imaginario y es un brujo poderosísimo y malvado que una vez fue humano.

Pues todo eso, ese mundo de fantasía que inspira e impulsa la serie es fruto de la imaginación de una mujer. Y por fin llegamos, ahora sí, al meollo de este artículo y a la protagonista de este artículo: Margaret Weis, que en la Universidad de Musuri, donde estudiaba a mediados de los 60, se convirtió en una lectora apasionada de Tolkien y que años después, junto a su amigo Tracy Hickman, creó el universo Dragonlance, el mundo en el que se desarrolla el juego de rol y ahora también en cierta manera el que alienta los nuevos capítulos de Stranger Things.

A Margaret Weis y Tracy Hickman los contrató una editorial especializada en juegos y les encargó coordinar una novela y tres módulos del juego, que serían el germen de todo lo que vino después. Weis y Hickman idearon los escenarios y el argumento y contrataron a un escritor para desarrollarlo, pero no les convenció el resultado, así que asumieron toda la responsabilidad del proyecto y se sentaron escribir ellos mismos. Lo demás, como se suele decir, es historia.

Aquello creció y creció, a la novela le sucedió una trilogía y así, a lo tonto, Margaret Weis ha acabado por publicar cientos de libros y ha creado no uno sino varios universos de fantasía, habitados por hechiceros, druidas, arqueros y guerreros, elfos, gnomos y hadas. Weis y su compañero literario se ha convertido en una de las escritoras de literatura fantástica más prolíficas y exitosas de la historia.

Por cierto, Weis y Tracy Hickman, que sigue trabajando juntos, han anunciado la salida el 2 de agosto de su primera novela desde hace una década, Dragons of Deceit, algo así como Dragones del engaño, y se supone que es la primera de una nueva trilogía. Así que, en las páginas de los libros y en las pantallas, el universo Dragonlance sigue en expansión.