Movistar+ tiñe de oscuridad 'Paraíso', la 'Stranger Things' española

Hace un año, Movistar Plus+ apostó por el género fantástico con Paraíso, una especie de Stranger Things noventera y a la española que tiraba mucho de la nostalgia y bebía de referentes tan diversos como Los Goonies, Verano azul, V, Historias para no dormir, La profecía y El pueblo de los malditos, por poner solo unos ejemplos. La música de Mecano y OBK contribuía a avivar los recuerdos de esa década, así como guiños a sucesos de la crónica negra de aquellos años. La plataforma estrena este jueves 16 de junio, del tirón, la segunda temporada de la ficción, compuesta de siete episodios que pondrán punto y final a la historia de una pandilla de adolescentes que deben enfrentarse a fuerzas malignas después de muertos.

La serie se oscurece aún más en esta nueva entrega, tirando hacia el terror. "Me parece que es el viaje natural de este tipo de historias", se justifica Fernando González Molina (Tengo ganas de ti, Palmeras en la nieve), director y cocreador de Paraíso junto a Ruth García y David Oliva. A ello contribuye que haya un nuevo universo de villanos que están mucho más presentes, las Novavis, un grupo de No Muertos que pueden poner en peligro el costero pueblo de Almanzora de la Vega en el que se ambienta la ficción.

"En la primera temporada habíamos construido unos malos en la sombra, que casi eran siluetas, y ahora ponemos mucho más la cámara sobre ellos", explica González Molina, que entiende que hay ciertos paralelismos entre Paraíso y Stranger Things por abordar el género fantástico a través de unos chavales. "Aunque lo que nosotros estamos contando es una historia de fantasmas, muertos y zombis, y ellos hablan de otra cosa", considera el director, que siempre tuvo claro que quería a unos protagonistas que tuvieran la misma edad que sus personajes adolescentes.

Adolescentes como protagonistas

"Parece una obviedad pero para mí era fundamental", recalca. "En la ficción, por no complicarte la vida en los rodajes trabajando con menores tendemos a que estos personajes de instituto tengan veintipico años, pero aquí queríamos hacer algo auténtico que conectara con los chicos de 15 o 16 años", apunta. Al casting se presentaron 3.000 chavales, de los que salieron elegidos Pau Gimeno, Cristian López, León Martínez, Héctor Gozalbo, María Romanillos y Patricia Iserte, a los que acompañan veteranos como Macarena García, Iñaki Ardanaz y Gorka Otxoa. Esta temporada se suman, además, Álvaro Mel (La Fortuna), con un personaje con cierta ambigüedad; Begoña Vargas (Las leyes de la frontera) y Laura Laprida, como las líderes de los malos, y la joven Carla Domínguez, como una inesperada aliada de los chicos.

La acción de esta segunda tanda de episodios se inicia tres años después que la anterior, en 1995, y al ritmo de uno de los grandes éxitos de Héroes del Silencio, Entre dos tierras. Queríamos empezar con una música rupturista y esa canción nos parecía que marcaba cómo los personajes habían madurado y se habían oscurecido", afirma su creador, que se inspiró en casos de la crónica negra de décadas pasadas como el de las chicas de Alcàsser, el asesinato de Anabel Segura y la desaparición de Madeleine McCann para darle toques misteriosos a la historia. "En vez de viajar a un thriller oscuro y terrorífico para contar lo que sucedió, quisimos darle una explicación fantástica".

González Molina reconoce lo difícil que es hacer fantasía en España. "Es carísimo y tiene su riesgo, porque no hay una cultura tan clara de este tipo de productos. Aunque en los últimos años las condiciones y el presupuesto de las teles han cambiado mucho en España, competimos cara a cara con series que tienen 10 veces más presupuesto", recalca. Para estar a la altura, Paraíso ha necesitado más de nueve meses de postproducción digital para crear efectos cada vez más complejos, casi 700 planos de VFX y la creación de nuevos universos, algunos de ellos, como el Abismo, generados íntegramente en CGI (Computer Generated Imagery).