CINE

Las divertidas anécdotas de la comedia francesa 'En su punto'

Los cineastas crearon el decorado de la carnicería en un local de Marais y utilizaron productos auténticos

Algunos vecinos creyeron que se trataba de un nuevo establecimiento y preguntaban por su apertura

Los actores aprendieron los gestos, la técnica, el trato y el argot de los carniceros

El director Christopher Thompson, durante el rodaje del filme.

El director Christopher Thompson, durante el rodaje del filme. / PIXEL

Eduardo de Vicente

El cine francés sigue demostrando su predilección por el género de la comedia con la única pretensión de sacarnos unas sonrisas y muchas de estas películas están llegando a nuestras pantallas. La última en estrenarse es En su punto (Tendre et soignant), una cinta a medio camino entre la comedia romántica y la lucha de sexos. Es la segunda experiencia como director (después de Bus Palladium) del actor Christopher Thompson, visto en filmes como Cena de amigos o La bûche. Está protagonizada por su esposa, Géraldine Pailhas (El adversario, Joven y bonita), el galán Arnaud Ducret (Familia a la fuerza, El club de los divorciados) y Stéphane de Groodt (Barbacoa de amigos, Cariño, yo soy tú).

La protagonista es Charly, una sofisticada editora de una revista de moda que ve cómo todo su mundo se derrumba cuando es marginada en su empresa. Paralelamente, el fallecimiento de su padre provoca que herede el negocio familiar, una carnicería en la que trabajó de niña y de la que se encarga Martial, un joven carnicero con ideas innovadoras con el que, casualmente, tuvo una aventura sin saber de quién se trataba. Piensa que debe cerrar la tienda pero varios factores la llevan a repensar su idea inicial. Es una simpática comedia de enredo, tan elegante como divertida. Su director, Christopher Thompson nos cuenta las anécdotas de su rodaje.

-Diseñando una carnicería. “La carnicería donde transcurre la acción es un decorado, es lo que tiene de mágico el cine. A veces se puede rodar en espacios naturales, pero lo que necesitaba el filme es que el lugar pudiera evolucionar, tenía que pasar de ser una carnicería tradicional a un lugar completamente renovado porque explica la trayectoria de los personajes, la historia de esa mujer en ese lugar de su infancia, de sus recuerdos, que ha querido dejarlo todo. Pero, a medida que transcurre la historia, se reconcilia con el lugar y lo reinventa. Esto es muy importante en la película, y era necesario que el lugar pudiera evolucionar con ella, por lo que se construyó ese gran establecimiento para poder rodar con facilidad. Trabajamos mucho en ello porque cuando se consigue un buen decorado, el resto es mágico”.

-¿Cuándo vais a abrir? “La construimos en un local grande, con almacenes en el barrio de Marais, donde se hacía a veces un showroom; otras, exposiciones, y era muy creíble. Cuando la abrimos para iniciar el rodaje, la gente del barrio pasaba, se paraba, miraba las vitrinas y nos comentaba: ¡Oh, esto es formidable! ¡qué bien, qué buena carne! ¿cuándo vais a abrir ? No había nada falso, todos los días teníamos carne de verdad, muy buenos productos. Teníamos un camión frigorífico y cada día abríamos nuestra carnicería, y teníamos lo mismo que cualquier otro carnicero de Paris: carne, pulardas, pollos… y todo tenía muy buena pinta”.

Todos los productos que ven en la tienda eran auténticos. 

Todos los productos que ven en la tienda eran auténticos.  / A CONTRACORRIENTE FILMS

-Aprendices de carnicero. “Los actores fueron unos días a la carnicería de Hugo Desnoyer, un célebre carnicero de Paris, que les aconsejó cómo hacerlo. Pasaron bastante tiempo, aprendieron los gestos, la técnica y, sobre todo, a impregnarse de la atmósfera: aprender el trato con la clientela que entra, aconsejarles qué trozo coger, cómo cocinarlo. También se habla un poco de la vida privada, se le da un trocito de jamón al niño pequeño y se le pregunta a la gente cómo le va, comentan qué guapo está su marido con esa camiseta..., o sea, una conversación amable, distendida”.

-Un reparto auténtico. “Desnoyer también nos ayudó a saber cómo obtener animales, trabajar con criadores y a seleccionar al resto de actores que hacen de dependientes en la tienda, ya que todos eran carniceros auténticos y algunos de ellos demostraron ser excelentes actores”.

Los miembros del equipo eran carniceros auténticos. 

Los miembros del equipo eran carniceros auténticos.  / A CONTRACORRIENTE FILMS

-El lenguaje privado. “Parte del reparto tuvo que aprender el louchebem, una especie de argot que utilizan sobre todo los carniceros parisinos y de Lyon, en el mercado de Les Halles. Es un lenguaje que se inventaron para comunicarse entre ellos sin que los clientes los entendieran y que se utiliza aún hoy en día”.

-Trabajando con animales. “Todas las secuencias rodadas en el campo con patos, corderos y otros animales se filmaron en solo dos días, muy rápidamente, en Condal, una bella región cerca de Lyon. No tuvimos problemas aunque las vacas eran muy muy grandes. La única anécdota fue que Geraldine se asustó mucho cuando se le puso delante un pavo... y es que ¡era enorme!”

Pese a lo que pudiera parecer rodar con animales no supuso un gran problema.  

Pese a lo que pudiera parecer rodar con animales no supuso un gran problema.   / MM FILMS

-Un vaso de vino en la cara. “Normalmente no me gusta sorprender a los actores. Todo está escrito, tenemos dobles para el vestuario, para las escenas, todo se prepara con antelación. Para la secuencia en la que Charly le arroja un vaso de vino en la cara a un compañero hicimos varias pruebas, yo quería saber cómo iba a quedar, si se iba a manchar mucho la camisa, se necesitó tiempo… Luego le comenté a ella que se lo iba tirar y ella no quería hacerlo y le contesté que no se preocupara. No le hacía ninguna gracia, pero yo sabía que todo iba todo a salir bien. Y así fue”.

-Los resbalones en la nieve. “La escena en la que ambos resbalan en la nieve estaba muy preparada ya desde el guion. Es una de las partes más cómicas, con dos personajes que se quieren separar, pero los elementos exteriores se lo impiden. Durante la discusión, la pareja quiere quedar muy digna y queda ridiculizada porque ambos están a punto de caerse. Estaba muy estudiada y luego se añadió el hielo en la calle con efectos especiales, así evitábamos que hubiera algún accidente”.

No hubo resbalones porque la nieve se añadió después con efectos especiales.  

No hubo resbalones porque la nieve se añadió después con efectos especiales.   / A CONTRACORRIENTE FILMS

-Trabajar con la pareja. “Para mí ha sido muy fácil dirigir a Géraldine, mi esposa. Me gusta mucho cómo trabaja, es una colaboradora extraordinaria y le tengo mucha confianza. A ella también le gusta mucho la forma en la que yo dirijo. Para que un matrimonio pueda compartir algo así es necesario conocerse muy bien, hay que establecer una relación especial, y los dos lo hemos conseguido”.

TEMAS