IGUALDAD

Niegan la maternidad biológica a una lesbiana de Alicante sobre su hijo por no estar casada

El Registro Civil sólo le permite adoptarlo y su pareja de hecho, la madre gestante, ha tenido que registrar al hijo común como madre soltera. Las afectadas han presentado una queja por discriminación

El Registro de Alicante no admite la maternidad de dos mujeres pareja de hecho.

El Registro de Alicante no admite la maternidad de dos mujeres pareja de hecho. / Allison Joyce

Victoria Bueno

"Salí del Registro Civil de Alicante sin hijo y temiendo por mi trabajo". Es la impactante sorpresa que ha sufrido una pareja de lesbianas que han tenido a su hijo por el método ROPA -una de ellas donó su óvulo a la otra, madre gestante-, y que a la hora de ir a registrarle como hijo común, se han encontrado con una tajante negativa que les ha dejado a cuadros y afectadas emocionalmente.

La madre biológica solo puede inscribir al bebé como madre adoptiva, y la gestante como madre soltera. "Es indignante y absolutamente discriminatorio" lamentan.

Pareja de hecho

Viven juntas desde hace cinco años, y como pareja de hecho están legalmente inscritas en el Registro Civil de la provincia desde hace dos años, en la misma ventanilla donde ahora les niegan el registro de su hijo común como madres.

Lo cuentan entre indignadas y alucinadas "porque es totalmente discriminatorio", insisten.

Y han decidido sacarlo a la luz porque están convencidas de que va a haber un aluvión de casos similares, ya que recientemente, el 14 julio de 2022, la Ley por la Igualdad de trato y no discriminación, introdujo la posibilidad de tener un niño por el método ropa, como es su caso, sin necesidad de estar casadas.

Incluso en el hospital donde dieron a luz, los sanitarios intentaron con toda normalidad registrar al niño como es habitual, "y nos tuvieron que llamar porque el programa no les permitía la opción al no ser matrimonio, aunque también nos aseguraron que en el Registro Civil no íbamos a tener mayor problema", relatan.

Pero no ha sido así. De hecho no se lo han permitido y su proyecto de familia se ha visto enturbiado por una "flagrante discriminación" como denuncian, porque no les han dejado inscribir como madres a su hijo común.

El registro

"Los funcionarios nos reconocen que es discriminatorio. Nos dijeron en el Registro que si fuésemos hombre y mujer no es ni necesario ser pareja de hecho ni casarse. Pero que hay una ley que, como pareja de mujeres, nos obligan a estar casadas, al contrario de lo que les ocurre a las parejas heterosexuales” advierten.

Han puesto el asunto en manos de abogados y, de entrada, han presentado una queja formal ante la Conselleria de Justicia "por discriminarnos como pareja homosexual a la hora de registrar a nuestro hijo. No hemos podido registrarlo por no estar casadas, a pesar de ser pareja de hecho desde diciembre de 2020. Si hubiésemos sido pareja heterosexual nos habrían permitido registrarlo sin necesidad de ser ni pareja de hecho ni de estar casadas", tal y como indican en el documento al que ha tenido acceso este diario, con su correspondiente registro de entrada.

Relatan incluso casos "de parejas de amigos que han inscrito a su hijo como de los dos, sin necesidad de presentar prueba alguna". Y en su caso, incluso el bebé es hijo biológico de la que cedió el óvulo a la mamá gestante.

Palo emocional

"Es un palo emocional para las dos, además de sentirnos discriminadas", recalcan. Su hijo no lo es sobre el papel. A pesar de que hasta ahora, aseguran, nunca se habían sentido discriminadas. "Me permitieron estar en el parto" -apunta la madre biológica-. "Y el trato sanitario ha sido excepcional en todos los sentidos" -añade la madre gestante-.

El portazo se lo dieron en el Registro Civil, "la misma ventanilla que nos inscribió como pareja de hecho y que no nos deja hacerlo como madres. Queremos que esta terrible experiencia sirva de algo a futuras madres que como nosotras son pareja de hecho pero no se han casado”, abundan.

Y que desde la administración pública se tome nota de la aberración que supone "ver nacer a tu hijo, de un óvulo tuyo, pero lo tenga que registrar como adoptado". "Madre adoptiva de su hijo biológico, en qué cabeza cabe", abundan perplejas.

Para colmo también han descubierto, a base de informarse tras lo sucedido, que la vecina comunidad de Cataluña sí contempla el reconocimiento legal del hijo por dos mujeres pareja de hecho, sin necesidad de estar casadas.

Del shock apenas se han recuperado para, al menos, registrar al bebé como madre soltera la que ha dado a luz, y como madre adoptiva la que es su madre biológica.

Consecuencias

Y lo que no quieren es que pueda volver a suceder algo tan traumático "porque si me pasa algo -dice la madre gestante, que ha tenido que inscribir a su hijo como si fuera su hermano, con sus mismos apellidos- mi pareja no tiene opción a quedarse con el niño, porque la custodia pasaría a mis padres y ascendientes directos".

Los suegros, señalan ambas, se han quedado sin nieto oficial también, y para los abuelos de la madre gestante también figura el bebé como un hijo más, no como nieto. "Aunque damos prioridad a otras cosas de la vida, porque la salud de nuestro hijo es lo primero, la verdad es que estamos muy indignadas", admiten.

Agradecen, de hecho, que todo haya ido bien en el parto y que la recuperación de la mama gestante haya ido sobre ruedas, lo que le permite afrontar ahora ella sola el cuidado y atención constante que exige el recién nacido, porque otra de las consecuencias de no poder reconocerlo como hijo común es que la madre biológica se ha visto obligada a incorporarse al trabajo e interrumpir de golpe el permiso de maternidad.

A su empresa le bastó, de entrada, la documentación como pareja de hecho y el nacimiento del bebé para concederle el permiso maternal, pero al habérsele negado la inscripción del niño como madre a todos los efectos, la situación ha cambiado. "Puedo demostrar con papeles en cualquier juzgado que soy la madre biológica, pero no me dejan registrarlo", reitera.

De repente se ha visto "de baja solo virtual", y por el poco tiempo que lleva en ese trabajo pensó incluso que le echarían, y con un hijo recién nacido. Afortunadamente no ha sido así, pero ha tenido que volver al trabajo de inmediato y resignarse como "madre adoptiva".