COMUNIDAD VALENCIANA

El coste de las materias primas pone en aprietos las obras públicas en Castellón

Las licitaciones desiertas en el arranque del 2022 multiplican por cinco a las del mismo periodo del año anterior

La ampliación de las Urgencias en el Hospital General de Castelló está en peligro y a expensas de una negociación. Autor: Gabriel Utiel

La ampliación de las Urgencias en el Hospital General de Castelló está en peligro y a expensas de una negociación. Autor: Gabriel Utiel

B. Martínez

 Las inversiones son uno de los apartados estelares de cualquier presupuesto de la administración pública. Un proceso que conlleva numerosos trámites, desde disponer de una partida en el presupuesto hasta tener al detalle todas las características en el pliego de condiciones. Y con el aliciente añadido de que, acabada la actuación, se puede presentar el trabajo hecho delante del electorado. Pero la actual escalada de precios afecta de manera especial a la obra pública. Las materias primas, como el hierro, la madera o el hormigón, se han puesto por las nubes, y las licitaciones todavía no han actualizado los importes. La consecuencia es que las empresas no quieren presentarse para no perder dinero y, de rebote, las administraciones pierden tiempo para cumplir con su programa de gobierno.

Los materiales de obra han experimentado un incremento de costes de más del 30% de media, y esto supone que las compañías dedicadas a la realización de obras para la Administración pierden dinero, porque los precios previstos se calcularon antes de esta fuerte subida. El presidente de la Federación de Contratistas de Obra Pública de la Comunitat Valenciana (Fecoval), José Luis Santa Isabel, pone cifras a esta realidad en la provincia. "Solo en el primer trimestre de este año son 17 las obras afectadas", comentó, tanto por procedimientos de contratación que se quedan desiertos como por ejecuciones interrumpidas. "Esto son más de 8 millones de euros, y alcanza al 6,45% del total de las obras, cuando en el mismo periodo del 2021 era de apenas el 1%", añadió. Por tanto, el problema se multiplica por cinco.

Hay ejemplos de todos los tipos. Como las obras de reparación de la cubierta del pabellón polideportivo La Garrofera de Almassora, que han quedado desiertas. O la ampliación del área de Urgencias del Hospital General de Castelló, que tras empezar se ha paralizado. Otro caso es el IES Jaume I de Burriana, cuya constructora solicitó modificar el presupuesto por el coste de los materiales, aunque el consistorio lo ha descartado.

Carlos Gomis, secretario general de la patronal de la construcción provincial, Apecc, señala la clave de este panorama: "Las administraciones trabajan con unos precios desfasados, de hace al menos dos años, que obliga a ir a pérdidas". Una problemática que afecta especialmente a los ayuntamientos. El director-gerente de la Cámara de Contratistas de la Comunitat, Manuel Miñés, insta a los diferentes organismos públicos "a que actualicen los precios antes de licitar, y que en las obras en marcha se contemplen los supuestos en los que se pueden revisar estos costes", ya que de lo contrario se incrementará el número de expedientes desiertos.

Medidas

El Gobierno ya ha tomado decisiones, con decretos que contemplan actualizar obras en marcha y un apartado dentro del paquete de medidas anticrisis aprobado en marzo. Pero la efectividad está lejos de ser la deseada. "Por un lado, porque solo se incluyen algunas materias primas muy concretas, como el hierro y el cobre, dejando fuera a la energía o materiales como la madera, que ha más que duplicado su precio", mencionó el presidente de Fecoal.

Otra de las complicaciones viene derivada de la disparidad de criterios entre los técnicos de las diferentes instituciones. "Los decretos se prestan a interpretaciones, por lo que se deberían hacer normas más claras», aportó. Incluso hay empresas «que siguen con la idea de que se les pague el sobrecoste", apuntó, sin saber si esto será así, con lo que implica para la liquidez de la compañía.