BARCELONA

Artadi abandona la política: “No puedo más. No me siento con fuerza para continuar"

La todavía concejala en Barcelona abandona el Parlament, el Ayuntamiento y sus responsabilidades directivas en Junts

Elsa Artadi emocionada durante su despedida.

Elsa Artadi emocionada durante su despedida. / Manu Mitru

Toni Sust

Elsa Artadi

 ha comparecido este viernes visiblemente emocionada para anunciar que no se presentará a las elecciones municipales de 2023 y que deja la política. La presidenta del grupo municipal de

Junts per Catalunya

 abandona los cargos directivos en el partido, el Parlament y el Ayuntamiento de Barcelona “No puedo más. No tengo energía para servir a la ciudadanía, no me siento con fuerza para continuar. Es una decisión personal, no política. No estoy en condiciones de servir a la ciudad que tanto quiero”, ha afirmado., sin precisar más qué le lleva a arrojar la toalla. Sencillamente, agotamiento, incapacidad para seguir adelante.

“Todos tenemos un momento en el que decimos basta y a mí me ha llegado. Es la única decisión que puedo tomar honestamente”, ha añadido. Apenas conteniendo las lágrimas, Artadi ha leído una declaración en la que ha repasado momentos de su trayectoria -“He servido a tres presidentes de mi país, gracias por su confianza”, ha dicho.

En principio, su plaza en el ayuntamiento podría ser ocupada por la que fuera número siete en la lista de 2019, Pilar Calvo, pero no está confirmado. La todavía concejala, que ha sido acompañada por sus compañeros de grupo en el consistorio pero también por otros integrantes de Junts, como la presidenta del Parlament, Laura Borràs, ha confirmado así la noticia que se conoció apenas 12 horas atrás. Artadi comunicó este jueves a su círculo más próximo que había decidido retirarse, aunque todo indica que no tenía intención de hacerlo público este mismo jueves. Según algunas versiones, quería informar de su decisión este mismo viernes, pero no pudo evitar que se supiera antes.

Cambio de escenario

Alguno de los integrantes de ese círculo decidió que era mejor darlo a conocer, y eso ha provocado una tormenta totalmente inesperada, a la vista de que la concejala participó el miércoles en un acto sobre la inseguridad en Barcelona en el que nada presagiaba su anuncio. Artadi renuncia a presentarse a las elecciones municipales que se celebrarán el 28 de mayo de 2023, una cita que no se le presentaba fácil.

Vicepresidenta del partido y diputada en el Parlament, su renuncia llega poco después de que redoblara su apuesta por seguir en el ayuntamiento. Artadi ganó en febrero las primarias para ser alcaldable de Junts sin que se presentara ningún oponente.

Hace menos de un mes, Artadi anunció que dejaba de ser portavoz de Junts per Catalunya para centrarse en la vida municipal. La presidenta del grupo posconvergente llevaba desde el principio del mandato manifestando que no dejaría el consistorio,

Trias 2023

Una afirmación que Artadi tuvo que defender con cierta vehemencia por que se daba por hecho que no lo acabaría después cuando la lista que encabezó en 2019 –formalmente fue la número dos por detrás de Joaquim Forn, alcaldable simbólico- solo logró cinco concejales, la mitad de los obtenidos por Xavier Trias en 2015, cuando perdió la alcaldía a manos de

Ada Colau

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Ahora, en pleno desconcierto por la sorpresa que ha suscitado el anuncio, el nombre de Trias vuelve a circular como posible alcaldable en 2023, aunque es una especulación algo prematura a la vista de la situación. En contra de esta opción aparece la lógica de que un excalcalde no debería de sentirse cómodo tapando así una vía de agua. A favor, que no hay otras opciones claras a la vista.

Otro dato que le acompaña: que tenga 76 años no es un obstáculo terminante a la vista de que uno de los candidatos que aparentemente tiene opciones de lograr la alcaldía en 2023 es el concejal y alcaldable de ERC, Ernest Maragall, que tiene 79.

La oposición municipal

Al margen de las escasas expectativas de un triunfo electoral el año que viene, Artadi atesora tres años de una pugna compleja en el Ayuntamiento, porque la vida de la oposición municipal es muy dura si sus votos no son imprescindibles, o por lo menos potencialmente útiles, para la toma de decisiones que afecten al día a día. Y los de Junts no lo son. Si en el primer mandato de Colau el grupo de Trias tuvo algún papel relevante, como pactar con la alcaldesa el plan de vivienda, en el actual sus cinco votos no tienen trascendencia alguna.

Con Barcelona en Comú y el PSC como socios del gobierno, y ERC apoyando desde fuera las decisiones más relevantes, a Artadi le quedó el papel amargo de intentar sacar la cabeza con una oposición de tono duro y efecto escaso. Una oposición tan relevante, o tan poco, como la de Luz Guilarte, Eva Parera y Josep Bou, presidentes de los grupos de Ciutadans, Valents y el PP, respectivamente.