¿TE LOS COMERÍAS?

Carnaval gastronómico: los platos más insólitos y sorprendentes

Platos que no son lo que parecen, propuestas irreverentes, ideas descabelladas...

El pato de Noma, un plato polémico.

El pato de Noma, un plato polémico. / Dabiz Muñoz / Instagram

Máscaras, sorpresas, desmesura… si por algo se caracteriza la fiesta del carnaval es por la ausencia de complejos, prejuicios e inhibiciones. De igual manera, hay veces en las que los chefs se vienen arriba, creando platos imbuidos de ese espíritu de provocación y locura. Aquí va una selección con la firma de cocineros de todo el mundo que dan la impresión de haber sido creados en medio de las fiestas más irreverentes del calendario.

El chocolate del restaurante El Cielo.

El chocolate del restaurante El Cielo. / Restaurante El Cielo / Instagram

El chocolate que se come con las manos

¿Recuerdas cuando de niño te pringabas las manos de chocolate y te las chupeteabas mientras tus padres se llevaban las manos a la cabeza? Esta experiencia puede revivirse en los restaurantes El Cielo del chef colombiano Juan Manuel Barrientos. Uno de los platos del menú consiste en chocolate que se sirve directamente sobre las manos del comensal. Puro placer primario.

El jamón marino de Ángel León.

El jamón marino de Ángel León. / Ángel León / Instagram

El jamón del mar

Si en carnaval nos transformamos en otra cosa, ¿por qué no pueden los platos hacer lo mismo? El chef del mar, Ángel León, es especialista en jugar con los sentidos creando embutidos a base de productos marinos que podrían pasar por una sobrasada o salchichón. Incluso ha creado un jamón de atún que tiene una apariencia similar a uno de cerdo. ¡Ah, y se corta igual!

El pastel-estropajo del cocinero Ben Churchill.

El pastel-estropajo del cocinero Ben Churchill. / Ben Churchill / Instagram

El pastel-estropajo

Vale, no hay comparación posible entre comerse un jamón (aunque luego no sea lo que uno espera) y... un estropajo. El repostero Ben Churchill elige objetos tan poco apetecibles como este o un cenicero para sus carnavalescas creaciones. El estropajo es, en realidad, un bizcocho de aceite de oliva con menta acompañado de una crema de caramelo y de una espuma láctea. 

Los globos de manzana verde y helio de Alinea (Chicago).

Los globos de manzana verde y helio de Alinea (Chicago). / Edsel Little / Wikipedia (CC)

El globo comestible

En cualquier fiesta que se precie no pueden faltar los globos. El que prepara Grant Achatz en su restaurante Alinea (Chicago) parece uno más pero la diferencia fundamental es que este se puede comer. Tiene un delicado sabor a manzana verde y está lleno de helio con lo que la voz del que se lo toma se transforma en la de un pitufo. Alta gastronomía al servicio de la risa y el cachondeo.

El cerebro de pato de Noma (Copenhague).

El cerebro de pato de Noma (Copenhague). / Dabiz Muñoz / Instagram

El cerebro de pato de Noma 

Una foto de Dabiz Muñoz en Noma, el restaurante número 1 del mundo actualmente según la lista 50 Best, desató la polémica en redes en 2018. Uno de los platos que probó el cocinero español era el cerebro de pato servido… junto al pico del animal y una de las alas en las que aún había plumas. Muchos pusieron el grito en el cielo.

El plato 'Utopía. Ternera roqueforti' de Mugaritz.

El plato 'Utopía. Ternera roqueforti' de Mugaritz. / José Luis López de Zubiria / Restaurante Mugaritz

Ternera con guarnición de moho

Es Carnaval, así que toca acabar con todas las reglas y normas establecidas. Uno de los mayores expertos en el rompe y rasga en gastronomía es Andoni Luis Aduriz. El chef de Mugaritz experimenta con tabúes de lo comestible como el moho. En su plato ‘Utopía’, unió un corte de carne de ternera con arroz al que había inyectado 'penicillium roqueforti'.

La hamburguesa cuadrada de Vegetta777 de La Gran Familia Mediterránea.

La hamburguesa cuadrada de Vegetta777 de La Gran Familia Mediterránea. /

La hamburguesa morada

Cuando Dani García anunció que incorporaba recetas de 'streamers' y 'youtubers' como Vegetta777, El Rubius o Willyrex a su servicio de 'delivery' La Gran Familia Mediterránea, muchos pensaron que se trataba de una inocentada. Nada de eso. Entre los coloridos y surrealistas platos, uno de los más excesivos es la Purple Cube Burger de Vegetta777, una hamburguesa coronada por una salsa morada que no parece de este planeta.

La cabeza de cochinillo de La Tasquería (Madrid).

La cabeza de cochinillo de La Tasquería (Madrid). / La Tasquería

La cabeza de cochinillo

Seguramente muchos rezarían por que este plato de La Tasquería (Madrid) fuera un trampantojo pero…. no lo es. Se trata de una auténtica cabeza de cochinillo que el cocinero Javi Estévez confita en aceite y luego fríe. Se presenta tal cual en la mesa, lista para ser devorada.

El pantagruélico cocido de Charolés (San Lorenzo de El Escorial).

El pantagruélico cocido de Charolés (San Lorenzo de El Escorial). / Restaurante Charolés

¿Un cocido? Pues sí, pero ¡qué cocido!

El carnaval es la fiesta pantagruélica por excelencia, donde todo exceso está permitido. Por eso, nos parece que tiene sentido meter en esta selección gastronómica al borde de la locura el cocido del restaurante Charolés (San Lorenzo de El Escorial). Codillo, costilla, tuétano, morcillo, chorizo, tocino, gallina… los distintos platos que lo conforman ocupan una enorme mesa de cabo a rabo y son un desafío -'challenge', que se diría ahora- incluso para los más comilones.

El donut de cocido de Perretxico.

El donut de cocido de Perretxico. /

Más cocido… en donut

En las tabernas Perretxico (Madrid y Vitoria) sirven el cocido en un donut. Hecho con la misma masa del dulce que todos los niños españoles se olvidaban de meter en la mochila del cole en los 80, su relleno incluye garbanzos, verduras y las carnes del cocido. El caldo se sirve en vaso aparte para mojar sin reparos. Buen provecho y feliz carnaval.