Buen inicio de la vendimia en el suroccidente asturiano

Los viticultores de la Denominación de Origen Protegida (Dop) Vino de Cangas, en el suroccidente asturiano, han empezado con buen pie la vendimia. De momento están recogiendo una uva de "calidad extraordinaria", lo que les compensa por las plagas sufridas (así el mildiu) y el impacto causado por los "caprichosos" cambios de tiempo.

Para el presidente de la Denominación, José María Martínez, el peor mes fue junio, cuando la vid florece y necesita un tiempo estable, no variable, como el que se dio. Sin embargo, los viticultores tuvieron que lidiar "con un tiempo caprichoso" que lo complicó todo y alteró los patrones normales de las plantas.

Con todo, "el objetivo es andar en datos similares a los de otros años, cuando rondamos los cien mil kilos de uva, y creo que se logrará. Las primeras impresiones son positivas", explica Martínez. El trabajo en sus viñedos, de la bodega Martínez Parrondo, está en marcha y explica que "está entrando uva sana y en bastante buen estado, lo que evita que haya que escoger mucho".

Luciano Gómez, de Bodegas La Verdea, en Cangas, está satisfecho: acaba de terminar la vendimia de blancos y está iniciando la de tintos. "Fue un año muy complicado, pero la uva está entrando sana y con una calidad exagerada, así que la cosecha es espectacular", señala, augurando una buena añada.

Mucho trabajo también tuvo Adrián Fernández, responsable de la firma Señorío de Ibias. "Para no perder la cosecha casi triplicamos el gasto en mantenimiento. Al venir un junio muy lluvioso y con calor, las viñas crecieron rápido. Además, producían mucha hoja, con lo que, si una temporada normal deshojamos una vez, este año lo hicimos cuatro", relata este viticultor ibiense que produce en ecológico.

Y añade: "Estoy contento, porque en tinto logré la misma cantidad que el año pasado y en blanco casi tripliqué la cosecha con la misma superficie".

Desde Cecos (Ibias), lamenta Lalo Méndez León el daño que el mildiu le ha causado. Tiene más producción que el año pasado porque ha crecido en hectáreas, pero "sin los ataques del mildiu hubiese sido más". En cambio, las parcelas de la zona alta del concejo le permitieron recoger una uva "de calidad extraordinaria".

"El balance es agridulce. En julio nos echábamos las manos a la cabeza y, al final, no fue tan mala la cosecha", señala el responsable de Bodegas y Viñedos Siluvio.

Añade el también enólogo ibiense que este año no le hizo falta tanta mano de obra como en otras vendimias por el buen estado de la fruta. "Recogimos una uva muy sana y casi no hubo que seleccionar", afirma.

En plena faena está la canguesa Beatriz Pérez, de Bodegas Vidas, que augura menos cosecha por las plagas. No obstante, como el resto de compañeros, está satisfecha por las buenas condiciones que presenta la uva con la que se harán los preciados vinos.

De manera paralela, en Cangas del Narcea están en marcha los preparativos para la XX Fiesta de la Vendimia, que se celebrará del 7 al 12 de octubre.