SANIDAD ANDALUZA

Dimiten el viceconsejero de Salud y el gerente del SAS en plena crisis por las listas de espera en Andalucía

El gobierno andaluz abordará los nuevos nombramientos de dos puestos claves en la sanidad andaluza, uno de los frentes más importante que tiene el presidente de la Junta de Andalucía

La consejera andaluza de Salud, Catalina García, comparece en el pleno del Parlamento por las listas de espera.

La consejera andaluza de Salud, Catalina García, comparece en el pleno del Parlamento por las listas de espera. / Eduardo Briones /Europa Press

Isabel Morillo

Isabel Morillo

El Gobierno andaluz abordará esta mañana en su reunión semanal los nombramientos del viceconsejero de Salud y del gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS), dos puestos clave en la sanidad pública andaluza, desbordada por las listas de espera y convertida en uno de los principales problemas que tiene el Gobierno de Juan Manuel Moreno. Según ha podido saber EL PERIÓDICO DE ESPAÑA de fuentes del Ejecutivo autonómico los actuales cargos "han presentado su dimisión". El número dos de la Consejería de Salud era hasta este momento Miguel Ángel Guzmán y el gerente del SAS era Diego Vargas. La consejera andaluza de Salud, Catalina García, seguirá en su responsabilidad, señalan fuentes del Ejecutivo andaluz, que evita hablar de ceses.

La directora gerente del Hospital Universitario Reina Sofía, Valle García, será la nueva gerente del Servicio Andaluz de Salud (SAS). García ha estado más de 6 años al frente del centro hospitalario cordobés y es doctora en Medicina y Cirugía por la Facultad de Medicina de la Universidad de Córdoba. María Luisa del Moral, del PP de Jaén, será viceconsejera de Salud. Es médico y actual portavoz del PP en materia de sanidad en el Congreso de los Diputados.  

Más de un millón de andaluces aguardan en una lista de espera en la sanidad pública para que le vea un especialista o pasar por un quirófano. Uno de cada cuatro pacientes en una lista de espera de la sanidad en España es andaluz. El agujero negro tiene dimensiones históricas y ha puesto en el punto de mira de la oposición y los sindicatos a la consejera de Salud.

Los problemas no remiten pese a que el gasto en sanidad en Andalucía alcanzará en 2024 los 14.246 millones de euros, un 44,8% más que en 2018, que es el año de referencia que usa el Gobierno de Juan Manuel Moreno (PP) porque es el último que gestionó el PSOE en la comunidad autónoma. Un 3% más que en el actual ejercicio. Poner en marcha cada día el Servicio Andaluz de Salud (SAS) supondrá una inversión de 39 millones de euros, con una plantilla de 121.577 efectivos, según la última estadística publicada por Salud (2022). El 7,1% del PIB andaluz se destinará a sanidad y habrá 556,8 millones de euros para nuevas inversiones. El 30% del Presupuesto andaluz se destina a la sanidad.

Las listas de espera en la sanidad pública han levantado en armas a la oposición en Andalucía, que se suma al unísono a las críticas que ya venían vertiendo las organizaciones sindicales y profesionales sobre la situación en la atención primaria y los hospitales andaluces. Tras un año y medio sin publicar los datos de tiempos de espera alegando “fallos técnicos”, el Ministerio de Sanidad difundió los datos para Andalucía y cuatro días más tarde, el pasado mes de noviembre, el Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha publicado las cifras de junio de 2023.

Hay más de un millón de andaluces aguardando una cita con el médico especialista (841.731) o pasar por quirófano (203.375). Datos que sitúan a la comunidad por encima de la media estatal y que demuestran un incremento importante en el número de andaluces que esperan para una intervención quirúrgica, eran 150.034 en junio de 2022.

Quejas de los sindicatos

Para el líder del PSOE andaluz, Juan Espadas, las dimisiones de la cúpula de la Consejería de Salud demuestran lo que el principal partido de la oposición lleva “año y medio denunciando”, que hay una “situación desastrosa de gestión de la sanidad pública en Andalucía”. A estos ceses hay que sumar, recordó Espadas, “nueve dimisiones anteriores en todos los niveles”. Se demuestra, sostuvo el portavoz socialista, que “claramente esas adjudicaciones a dedo y sin procedimiento de la transferencia de recursos públicos a la sanidad privada era la punta del iceberg y que existe una incapacidad de gestión que es muy grave”.  

Desde UGT consideraron que "son dimisiones forzadas que para nada van solucionar el estado de caos" en el que creen que vive la sanidad andaluza. "El verdadero cambio que necesitamos es el de cambio de política sanitaria que se lleva desde la Consejería de Salud, y es su máxima responsable la que debe de ser cesada de forma inmediata", señaló Antonio Macías, portavoz de sanidad de UGT en Andalucía.