VERTEDERO DE LOS RUICES

Llueve plástico sobre Colmenarejo, en Málaga

La Asociación de Vecinos de Colmenarejo denuncia la invasión de plástico que padecen cuando sopla el levante, por la vecindad con el vertedero de Los Ruices. Teresa Porras: «Ya se está limpiando»

El presidente vecinal de Colmenarejo, José Ángel Moreno, detrás de un cerro cubierto de basura, la semana pasada

El presidente vecinal de Colmenarejo, José Ángel Moreno, detrás de un cerro cubierto de basura, la semana pasada / A. V.

Alfonso Vázquez

«Las bolsas caen en los patios de las casas y llegan hasta el PTA», lamenta José Ángel Moreno, presidente de la Asociación de Vecinos de Colmenarejo. 

José Ángel pasea junto a la presidenta vecinal de Campanillas, Carmela Fernández y La Opinión por un camino para practicar senderismo «que viene de San Cayetano en el Puerto de la Torre llega hasta la Torre del Prado y baja hasta el Cementerio de San Gabriel», señala, con preciosas vistas de Colmenarejo, el PTA y Campanillas. 

Lástima que en buena parte de él, los senderistas tengan que convivir con una lluvia de plástico depositada en jaras, tomillos, pitas, romeros y hasta en almendros en flor. 

«Mira qué vista tan bonita de Campanillas y la mierda que tenemos encima», lamenta la presidenta vecinal de Campanillas, que subraya: «No tengo por qué aguantar que la suciedad de Málaga venga a mi casa».  

Como explica José Ángel Moreno, la caída de plásticos sobre los cerros más próximos a Colmenarejo y que a veces incluso alcanzan el Parque Tecnológico de Andalucía se produce «cuando viene el levante», a causa de la vecindad de este barrio de Campanillas con el vertedero de Los Ruices, que ha ido aproximándose a Colmenarejo con los años.  

«Antes teníamos el problema de los malos olores y ahora, hay veces que cuando sopla el levante no se puede aquí parar de bolsas», critica. 

Los plásticos de Los Ruíces invaden los cerros de Colmenarejo

Los plásticos de Los Ruíces invaden los cerros de Colmenarejo / L. O.

El presidente vecinal explica que aunque el Ayuntamiento ha colocado en la linde del vertedero -en lo alto de un cerro de la antigua Dehesa de Garnica- una hilera de cipreses para frenar el vuelo de las bolsas de plástico, «los cipreses no crecen en tres días» y no retienen la mayor parte de esta ‘lluvia’ no querida. El presidente vecinal calcula que llevan unos 15 años «sufriendo este problema» y aunque los malos olores han bajado, la invasión de los plásticos, que convierten los alrededores de Colmenarejo en pura ‘basuraleza’, continúa.

«Los conejos comerán plástico», critica mientras señala en el camino de tierra pequeños excrementos de estos animales. José Ángel Moreno explica además que, cuando se producen invasiones de plástico como esta, «el Ayuntamiento viene y las recoge pero hace como unos tres años que aquí no limpian», calcula. 

Los dos presidentes vecinales coinciden en que el Ayuntamiento debe enterrar mejor, con capas de arena, los plásticos y reciclarlos. José Ángel Moreno aprovecha para responsabilizar tanto a la concejala de limpieza, Teresa Porras como al alcalde, Francisco de la Torre, de este problema. 

«Cuando el levante se lleva la arena de la playa en seguida se actúa pero por aquí, por la zona del vertedero, no se asoman», critica.

Respuesta del Ayuntamiento

La Opinión contactó ayer lunes con la concejala de los Servicios Operativos, Teresa Porras que informó de que ya había operarios retirando los plásticos de la zona y de que se trataba de un problema que sucedía «en todos los vertederos del mundo». El entorno estará limpio «en 2 o 3 días», subrayó .