ELECCIONES ANDALUCÍA

Así fueron los resultados de las elecciones andaluzas de 2018: el fin de cuatro décadas de hegemonía del PSOE y la irrupción de Vox

Las elecciones de 2018 supusieron un giro radical en la región, con el primer gobierno de derechas gracias a la alianza de PP, Cs y Vox, pese a que el PSOE volvió a ser la fuerza más votada

Los candidatos a las elecciones de Andalucía.

Los candidatos a las elecciones de Andalucía.

Héctor González

Héctor González

La campaña de las elecciones de Andalucía 2022 encara su recta final antes de la cita con las urnas del próximo domingo 19 de junio. Las últimas encuestas sitúan al PP al borde de la mayoría absoluta, lo que permitiría a Juanma Moreno, actual presidente de la Junta, gobernar en solitario sin necesidad de recurrir a pactar con Vox, que saldría como tercera fuerza, ni con Ciudadanos, su aliado en la presente legislatura. Por su parte, el PSOE quedaría segundo, pero volvería a perder puntos, hasta 2,5 respecto a 2018, y se prevé que la coalición de izquierdas protagonice un sonoro batacazo.

Sea como fuere, el domingo saldremos de dudas sobre el futuro político de Andalucía. Mientras tanto, cabe analizar qué sucedió en las anteriores elecciones, en diciembre de 2018, y qué cambios se esperan respecto a aquellos comicios. Y es que las anteriores elecciones autonómicas andaluzas supusieron dos hitos de gran relevancia: el final de cuatro décadas de hegemonía socialista en la comunidad y la irrupción por primera vez de Vox en las instituciones españolas.

Si bien en 2018 el PSOE repitió, un año más, como fuerza más votada en Andalucía, el pacto entre PP y Ciudadanos logró arrebatarles la posición de fuerza. Hasta ese año, el grupo socialista había ganado todas las elecciones, ininterrumpidamente desde las primeras celebradas el 23 de mayo de 1982, en 496 de los alrededor de 778 municipios de la comunidad. Sin embargo, la mayoría conformada por PP, Cs y Vox supuso un giro histórico en la región y la entrada de la ultraderecha en la cámara autonómica.

Un cambio de fuerzas de los bloques que se reflejó también en la realidad de muchas ciudades y pueblos andaluces, que cambiaron el sentido de su voto. Y que todo apunta a que tendrá su continuación en las elecciones de este 19J, en las que se espera que el bloque de izquierdas vuelva a debilitarse y que Ciudadanos, teórico representante del centro- derecha en 2018, continúe con su rápida destrucción en favor de la derecha tradicional y la extrema derecha.

Los resultados de 2018

A pesar de repetir como fuerza más votada en 612 de los 778 municipios andaluces, y hacerse con 33 escaños, el PSOE obtuvo en 2018 su peor resultado histórico. El partido socialista logró aglutinar el 27,9% de los votos; un resultado siete puntos por debajo del que, hasta aquel entonces, era su resultado más bajo en términos de porcentaje de voto, el de 2015. Asimismo, los de Sánchez perdieron 51 municipios respecto a aquellas elecciones.

Una suerte parecida fue la que corrió el PP, que cosechó uno de sus peores resultados en democracia, al perder siete de los 33 escaños que había logrado en 2015. Sin embargo, a pesar de la debacle en el voto (20,75%), los populares se alzaron como fuerza más votada en 109 municipios, 10 más que en los anteriores comicios, y obtuvieron por primera vez en su historia la posibilidad de gobernar en Andalucía gracias a la alianza con Ciudadanos y Vox.

La coalición Adelante Andalucía, liderada por aquel entonces por Podemos e Izquierda Unida, antes de la ruptura con la formación morada en 2020, se hizo en 2018 con 17 escaños, tres menos que en 2015. Además, logró ser la fuerza más votada en 29 localidades, 19 más que la suma de Podemos e IU.

Ciudadanos, por su parte, obtuvo en 2018 su mejor resultado histórico con 21 escaños, doce más que los que logró en 2015, año en el que entró en el parlamento andaluz. Por último, Vox fue la gran sorpresa electoral de aquel año, logrando doce escaños y entrando por primera vez en la cámara regional.

Aquellas elecciones supusieron una ruptura del tradicional bipartidismo en la región, pues la suma de PP y PSOE, con 59 escaños en total, cedió gran parte de su peso histórico frente al auge de las nuevas formaciones, Ciudadanos, Adelante Andalucía y Vox, que aglutinaron 50 escaños. En aquellos comicios también se produjo un repunte de la abstención, que superó la barrera de los 40 puntos (41,35%), con una participación del 58,65%.