Guerra en Ucrania

Pedro Sánchez rectifica y anuncia el envío de armamento defensivo y ofensivo a Ucrania

El presidente solemniza el giro en el Congreso para que no se cuestione el "compromiso" de su Gabinete con el pueblo ucraniano | Anuncia que España impulsará en la UE y en la OCDE la declaración de Rusia como un paraíso fiscal

Pedro Sánchez.

/ EP

Juanma Romero

España finalmente también enviará armas de manera directa a Ucrania. O sea, de modo bilateral, al igual que está haciendo la mayoría de países de la UE. No se canalizará la ayuda de material ofensivo solo a través del fondo europeo de ayuda a la paz. El presidente del Gobierno rectifica, por tanto, respecto a la posición mantenida hasta ahora para que quede claro el "compromiso" de su

Ejecutivo

con el pueblo ucraniano.

Pedro Sánchez solemnizó ese giro este miércoles ante el

Congreso

, en el pleno extraordinario convocado para informar de la guerra en el este del Viejo Continente, aunque en las últimas horas en su círculo se había deslizado esa posibilidad y la titular de Defensa, Margarita Robles, abrió de hecho sutilmente esa puerta en una entrevista el martes por la noche en 'El objetivo' (La Sexta).

El jefe del Ejecutivo alegó que siempre ha atendido que el ataque de Rusia no es solo a Kiev, sino a Europa, a sus "principios y valores", y por eso ha defendido acciones "coordinadas a nivel europeo", y no un "sumatorio" de iniciativas de cada país, contra las que advertía, recordó, el alto representante, Josep Borrell.

Por eso el Ejecutivo apoyó la activación del fondo europeo de apoyo a la paz (FEAP), dotado con 500 millones, para la entrega de armamento ofensivo y defensivo por parte de la UE a Ucrania, fondo del que España es el cuarto donante (40 millones).

"Esta ha sido mi posición y la posición del Gobierno. Y creo que es la adecuada. Lo creo firmemente. A una amenaza europea, debemos dar una respuesta europea, coordinada y unida. Es lo que nos pidió el alto representante, Josep Borrell, y a esa llamada España respondió al instante. Pero, como veo que hay grupos que ponen en cuestión el compromiso del Gobierno de España,

y para mí y para el Gobierno es tan importante, tan fundamental, la unidad de todos, les anuncio que España entregará a la resistencia ucraniana, material militar ofensivo", justificó Sánchez.

El jefe del Ejecutivo trasladó la "solidaridad" del país y de su Gabinete hacia Ucrania, e insistió en que España la apoyará para "hacer frente a este ataque". Y además de las acciones conjuntas bajo el paraguas de la UE y de la OTAN, el Gobierno ha enviado 20 toneladas de ayuda humanitaria y dos aviones cargados de equipos personales, material defensivo y equipamiento médico. "Tengo el firme propósito de proporcionar a Ucrania toda la ayuda y apoyo que sea posible", prometió.

Y ahí encajaba, por tanto, el anuncio de que España también entregará material de combate de manera directa a Kiev, anunció que irritó sobremanera a Podemos, pero que sin embargo apoyó la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz. De hecho, esa división dentro del espacio morado se visualizó en el pleno: al acabar su intervención Sánchez, Díaz y los ministros de Consumo y Universidades, Alberto Garzón y Joan Subirats, le aplaudieron en pie, como hizo la bancada socialista. Ione Belarra e Irene Montero, en cambio, batieron sus palmas sentadas.

Reinvención a Podemos

El lunes, en una entrevista en TVE, el presidente descartó con rotundidad esta vía, y cuando se le inquirió si lo hacía para mitigar las tensiones con su socio de Unidas Podemos, dio una larga cambiada. Las preguntas se repitieron ayer en la Moncloa tras el Consejo de Ministros, y llegó la misma respuesta: España enviaría armas a Ucrania, pero a través del mecanismo europeo. Los morados, por su parte, habían mudado de postura de manera gradual: el lunes, rechazaban la activación del fondo europeo para la aportación de material ofensivo, pero ayer martes apoyaron la línea "prudente" del presidente.

Este miércoles, se consumaba el giro por parte del Ejecutivo, a la vista además del recrudecimiento del ataque ruso sobre su país vecino. El anuncio fue acogido con aplausos por la bancada socialista, no secundados, significativamente, por la de Unidas Podemos. "El recuerdo del 'no a la guerra' de Irak [de 2003] hoy es el 'no a la guerra de Putin'", alegó, para intentar vencer los resquemores de una parte de la izquierda que ha vuelto a enarbolar la bandera antiatlantista.

En la réplica a Cuca Gamarra, la nueva coordinadora general del PP, tampoco se explayó en las explicaciones del giro: como la "unidad" de todas las fuerzas es para él importante, y este es un "momento definitorio" en la historia de Europa, hizo ese anuncio, aunque a su juicio el "paso decisivo" lo dio la UE el domingo al cambiar el sentido del fondo europeo de apoyo a la paz, concebido inicialmente para ayudar al entrenamiento de tropas en zonas como Mali o Mozambique, no para aportar material ofensivo.

El presidente sí replicó con contundencia a Pablo Echenique, el portavoz de

Unidas Podemos

. Reconoció la "discrepancia" y le dijo a las claras que su planteamiento es "equivocado", porque Ucrania tiene estatuto de país agredido y sus ciudadanos están combatiendo "de manera desigual ante una potencia agresora" como Rusia. Se trata de "ayudar a una población sin capacidad para defenderse" y que lo haga "en igualdad de condiciones". Incluso le afeó que, en su apelación a desescalar el conflicto, no exigiera a un "sátrapa" como Vladímir Putin que primero cesara los bombardeos, y que ha sido él quien "voló" los puentes de diálogo.

Desde la Moncloa, se apuntaba que este es un conflicto vivo y que por tanto hay que adaptarse a la evolución de los acontecimientos. Ello explicaría el giro del presidente. Giro del que él mismo informó a Díaz en la tarde del martes, igual que el ministro de Exteriores, 

José Manuel Albares,

se lo comunicó a la secretaria general de Podemos, la ministra Ione Belarra.

No habrá envío de tropas

En su discurso inicial, Sánchez defendió la "unidad de Europa y de sus Estados miembros" y también la unidad de todos los grupos en el Congreso en "la respuesta al brutal ataque de Putin en Ucrania". Y recalcó, una vez más, que España "no va a enviar tropas a Ucrania", porque tampoco lo hará la OTAN, que sí ha acordado, en cambio, reforzar el flanco oriental para "asegurar la defensa de todos los aliados" frente a Moscú.

La UE no intervendrá con efectivos, pero sí lo está haciendo ya con durísimas sanciones al régimen de Vladímir Putin, como la exclusión de algunos bancos rusos del sistema de pagos Swift, la prohibición de sobrevolar el espacio aéreo de toda la Unión y el corte de emisión de varios medios propagandísticos del régimen, como Russia Today o Sputnik. Además, anunció, España impulsará en la UE y en la OCDE la declaración de Rusia como un paraíso fiscal, incluyendo a Moscú en la lista de paraísos fiscales. Y, como ya subrayara el lunes, advirtió a Putin de que las medidas estarán vigentes "hasta que ponga fin a la invasión y salga de Ucrania, de toda Ucrania, y regrese a las fronteras reconocidas internacionalmente de la Federación Rusa".

Sánchez fue muy contundente contra el autócrata ruso, contra su "provocación inaceptable". Sus acciones representan, dijo, un "atentado" contra los valores sobre los que se sustenta el orden internacional desde el final de la Guerra Fría, una "amenaza directa" a la soberanía e integridad territorial de las naciones, los derechos humanos y la resolución pacífica de los conflictos. Es un "intento brutal de frenar la construcción de un espacio político, el europeo", que se cimenta sobre unos valores opuestos al "autoritarismo" que el líder ruso encarna.

"Esto es lo que en realidad teme Putin. Teme la construcción y el fortalecimiento de una potencia geopolítica, la Unión Europea, a las puertas de sus fronteras. Putin teme a Europa porque teme la democracia. Por eso ataca a Europa", sostuvo. Las bombas sobre Ucrania, pues, simboliza la "lucha encarnizada entre dos modelos antagónicos de ser y estar en el mundo". Pero Putin se ha encontrado, ante su agresión, una Europa "más unida y determinada que nunca".

Suministro de gas y petróleo "garantizado"

El Gobierno defiende que esa unidad internacional ha de trasladarse también a la arena española. Por eso Sánchez oficializó lo que ya adelantó el lunes en TVE: llamó a los grupos a dar una respuesta unitaria frente a la invasión y para "mitigar el impacto de la guerra", ya que las sanciones a Rusia tendrá un "impacto" en la economía española, en sus exportaciones, en las inversiones de las empresas nacionales en ese país o en el flujo de turistas rusos. Pero, sobre todo, se pueden producir "interrupciones bruscas" en las importaciones de Ucrania (uno de los principales suministradores de cereales y aceite de girasol) y tensiones en los mercados energéticos, aunque la dependencia española del gas y del petróleo rusos es menor: solo se importa el 4,6% del crudo y el 8% del gas. La seguridad del suministro "está garantizada", aseveró.

Ante la previsión de una guerra "larga", Sánchez pidió la unidad de los grupos en dos frentes, en el europeo, para "trabajar en nuestra autonomía estratégica, reducir nuestras dependencias y consolidar nuestra capacidad de actuación", y en el nacional. En ese punto, anunció un plan de medidas económicas y sociales, como la prórroga de los dos tipos de bono eléctrico, un pacto de rentas entre empresarios y sindicatos, la reducción del consumo energético en edificios públicos, la reducción del 80% de los peajes a más de 600 consumidores electrointensivos, la aceleración del despliegue de las renovables y del mecanismo RED de flexibilidad y estabilización en el empleo.

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El Congreso en pie aplaude al número dos de la Embajada de UcraniaEl pleno extraordinario de este miércoles dejó una imagen de unidad poco habitual. Cuando Pedro Sánchez se dirigió al ministro consejero y encargado de negocios de la Embajada de Ucrania en Madrid, Dmytro Matiuschenko, para expresarle el "dolor del pueblo español por la pérdida de vidas humanas", el hemiciclo estalló en un emocionado aplauso, puesto en pie.

Los diputados de todos los grupos y el Gobierno se sumaron a ese largo aplauso de reconocimiento al pueblo ucraniano. Sin excepciones. En la tribuna de invitados, Matiuschenko se llevaba la mano al corazón, en señal de agradecimiento. El presidente le pidió que trasladara ese calor y respaldo a sus compatriotas y a sus Fuerzas Armadas.

"Y reiteramos nuestro compromiso, solidaridad y apoyo a la soberanía e integridad territorial de Ucrania, así como nuestra admiración y respeto por la heroicidad y determinación con la que su pueblo está combatiendo por su libertad e independencia". Compromiso, señaló Sánchez, que transmitió el domingo, personalmente, al presidente ucraniano,Volodímir Zelenski, en su última conversación telefónica.