BANCA

El BBVA prevé mantener su rentabilidad y comprar el Sabadell en 2025

Su presidente, Carlos Torres Vila, afirma seguir "confianza plenamente" en el éxito de la opa sobre el banco de origen catalán pese al rechazo que ha despertado

Carlos Torres Vila.

Carlos Torres Vila.

Pablo Allendesalazar

Pablo Allendesalazar

El presidente del BBVACarlos Torres Vila, prevé que el banco obtenga este año unos niveles de rentabilidad "similares" a los de 2024 pese a los recortes de los tipos de interés iniciados por los bancos centrales y la creciente incertidumbre geopolítica. "Vemos dinámicas muy positivas en nuestro negocio de crecimiento del crédito en España y en México, de una mejoría marcada y mostrando ya el valor a largo plazo en Turquía y en Argentina, de buena calidad crediticia, de una gestión proactiva del riesgo de tipos de interés", ha apuntado en una conversación grabada con una empleada y distribuida por la entidad este lunes (una práctica inusual en el mundo empresarial que el banco suele hacer una vez al año desde 2020).

El principal interrogante que afronta la entidad, en cualquier caso, es si su oferta de compra del Sabadell tendrá éxito pese a la fuerte oposición política, empresarial y social que ha provocado, especialmente en Catalunya y la Comunitat Valenciana. Pese a este rechazo, el banquero ha vuelto a mostrarse optimista. "Confiamos plenamente en el éxito de la operación por su atractivo para los accionistas de Banco Sabadell. Estamos convencidos de que los accionistas de Banco Sabadell valorarán el extraordinario proyecto de unión de ambas entidades", ha asegurado. 

Torres, así, ha insistido en los argumentos que viene manejando el BBVA desde que el pasado mayo presentó su opa hostil sobre su rival: "Esta operación se plantea porque es buena para todos: para los clientes, para los accionistas, para los empleados de ambas entidades y para la sociedad en general". Asimismo, ha defendido los "inéditos" compromisos que el banco presentó a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) para mitigar los efectos perniciosos de la integración sobre la competencia. El organismo supervisor juzgó que tenía que analizar de forma más profunda si eran suficientes y, como adelantó este diario, el banco está dispuesto a profundizar en los mismos para tratar de obtener su visto bueno.

Crecimiento e incertidumbre

El banquero ha afirmado que 2025 será un año de "crecimiento continuado", pero también "marcado por la incertidumbre" y por un "entorno muy exigente". En particular, ha sostenido que Europa se encuentra en un momento "crucial porque tiene que fomentar más crecimiento y tiene que consolidar su papel en un mundo más fragmentado". En este punto, ha empleado otro de los argumentos que suele utilizar el banco para defender su opa sobre el Sabadell: "Necesitamos también que los bancos europeos sean más grandes, más sólidos, para poder cumplir con su papel. Y Europa se está quedando atrás en este sentido: entre los 25 bancos de más valor del mundo no hay ningún banco de la zona euro".

En cuanto a los países donde el BBVA tiene presencia, ha apuntado que el España registrará un "crecimiento continuado" durante 2025, con "quizá tasas algo inferiores, pero superando con creces las tasas de crecimiento europeo". También ha afirmado ver "potencial de crecimiento adicional en México por su cercanía a Estados Unidos y su ventaja relativa en costes", sin referirse a la incertidumbre que genera la llegada de Donald Trump a la presidencia. Asimismo, ha apuntado que hay "dinámicas de crecimiento y evolución positiva" en Turquía y Argentina, que vienen de una "crisis inflacionaria y cambiaria muy importante, pero que están ya saliendo".

Al contrario que en los últimos años, Torres no ha aprovechado la ocasión para lanzar un mensaje sobre la política futura de dividendo a los accionistas, con lo que parece haberse guardado esa carta hasta la presentación de los resultados anuales del banco en unas semanas. Así, se ha limitado a destacar que el BBVA ha distribuido unos 15.000 millones de euros a sus propietarios entre dividendos y recompras de acciones desde 2021, así como que desde comienzos de 2019 los accionistas "prácticamente han triplicado el valor de su inversión". En la misma línea, ha subrayado que la entidad "ha superado con creces" los objetivos estratégicos que se fijó para el periodo 2021-2024, lo cual parece abrir la puerta a que presente una nueva estrategia para el próximo trienio, aunque está por ver si esperará a conocer el desenlace de la oferta por el Sabadell para hacerlo.