Opinión | APUNTE

Barcelona, inversión y 'start-ups'

Si la cosa no se tuerce por algún conflicto geopolítico o el recrudecimiento del alguno de los existentes, como la guerra en Ucrania o en Gaza, 2025 puede ser un año de inversiones y operaciones corporativas

Imagen de archivo de las instalaciones del Tech Barcelona, donde trabajan varias 'start-ups'.

Imagen de archivo de las instalaciones del Tech Barcelona, donde trabajan varias 'start-ups'. / JOSEP GARCÍA

Barcelona afronta un ejercicio positivo en cuanto a la inversión. Y en los sectores que pesan, como el industrial y el de los servicios. Lo prevén consultoras y asesores empresariales. Si la cosa no se tuerce por algún conflicto geopolítico o el recrudecimiento del alguno de los existentes, como la guerra en Ucrania o en Gaza, 2025 puede ser un año de inversiones y operaciones corporativas. Un ejemplo es el sector inmobiliario, en el que ya se cerraron en la segunda mitad de 2024, tras una primera más incierta, operaciones significativas.

El optimismo reina gracias a una coyuntura económica marcada por una elevada velocidad de crucero de la economía, de la española en su conjunto; y, en especial, de la catalana, que hasta el tercer trimestre del ejercicio pasado, registraba una tasa interanual del 3,9%.

Y, en este contexto, destaca la consolidación de la capital catalana como ecosistema para las 'startups' y empresas de base tecnológica. Lo mismo sucede con los centros de innovación y tecnológicos de multinacionales. En los últimos meses, se ha superado de largo el centenar. Y esta misma semana, el gigante alemán Kion ha aterrizado en el DFactory, las instalaciones dedicadas a la industria 4.0 del Consorci de la Zona Franca de Barcelona.

Pero, si bien el contexto resulta atractivo para las 'start-ups', sigue fallando una de las patas esenciales para fortalecer aún más el rol de la ciudad como polo de atracción de estos negocios. No faltan voluntarios para financiar los estadios iniciales o las etapas en las que los proyectos están consolidados, pero sí que se carece de entidades especializadas en las fases en las que las compañías han de dar el salto y requieren grandes recursos, "cuando queman más dinero", afirman los expertos.

Y no se ha logrado que Barcelona cuente con esta oferta hasta ahora. De hecho hay 'startups' que recalarían en la capital catalana y que se acaban yendo a otras zonas en Europa o EEUU en las que el acceso al capital en las fases de dar el salto es mucho más fácil. Esa sí que es una de las asignaturas pendientes.