INFRAESTRUCTURAS DE RECARGA EN EDIFICIOS

La nueva movilidad exige contar con puntos de recarga eléctrica

Ajustar la normativa a la demanda de vehículos de este tipo y adaptar los espacios a las necesidades que genera son claves para el desarrollo de este modelo sostenible

De izquierda a derecha, Adrien Castanié (ChargeGuru), Rubén del Río (JLL), Gabriel Santamarina (‘El Periódico de España’), Javier Martínez (ChargeGuru), Jorge Merino (CBRE) y Sarai Gómez (Cushman& Wakefield).

De izquierda a derecha, Adrien Castanié (ChargeGuru), Rubén del Río (JLL), Gabriel Santamarina (‘El Periódico de España’), Javier Martínez (ChargeGuru), Jorge Merino (CBRE) y Sarai Gómez (Cushman& Wakefield). / Xavier Amado

Cristina Andrade del Alcázar

Cristina Andrade del Alcázar

Pese a que el camino hacia la movilidad más sostenible avanza con un ritmo más lento de lo esperado, el coche eléctrico va poco a poco permeando en la sociedad. En este contexto, la necesidad de contar con puntos de recarga en diferentes espacios –no solo públicos, también privados, como son los edificios de oficinas– se presenta como algo crucial para continuar impulsando este modelo.

Bajo el título Infraestructuras de recarga escalable en los edificios en el mercado español, la semana pasada El Periódico de España y ‘activos’, el vertical sobre economía y empresa de Prensa Ibérica, junto con el patrocinio de ChargeGuru, celebraron un encuentro con expertos en Madrid en el que se abordó el estado actual de las infraestructuras de recarga desde diferentes ángulos.

Javier Martínez, business development manager para España de ChargeGuru Iberia, explicó que desde su compañía están llevando a cabo "soluciones de recarga de coches eléctricos para edificios de oficinas". "Hoy está creciendo mucho el mercado, pero también la preocupación de las empresas con estar en sintonía" con este ecosistema, argumentó.

Tipos de negocio

La empresa experta en movilidad eléctrica cuenta con una red de más de 500 instalaciones en toda la Unión Europea y más de 15.000 puntos de recarga. "Ejecutamos todos los proyectos a nivel de ingeniería, instalación y mantenimiento, estamos dedicados sobre todo a los garajes que componen o comparten oficina", destacó. El representante de la compañía advirtió de que, "actualmente, quien tenga empresas operando en elmismo edificio tiene una serie de peculiaridades y barreras para poder instalar puntos de recarga, ya sean para uso propio o para uso de sus clientes".

Por su parte, el director de ChargeGuru Iberia, Adrien Castagnié, aseguró que su modelo de negocio es diferente a otros ya que son ellos los que realizan la inversión inicial: "Pido a la empresa una cuota mensual fija y la calculo en función de la inversión. Invertimos porque hay necesidad, por lo que no dependemos del tráfico". Castagnié destacó que "todo el mundo dice que el primer obstáculo es el precio, pero cuando haces números entre el precio y el mantenimiento, te das cuenta de que realmente, si los usuarios tienen la solución de carga en sus casa o en su trabajo, se compran un coche sin problema".

El project & development services Spain de JLL, Rubén Del Río, apuntó que "si queremos que el modelo eléctrico y la recarga lleguen a buen puerto, lo primero que hay que conseguir es que el vehículo eléctrico sea una alternativa para la gente de la calle". "Y creo que a día de hoy no lo es", apostilló. Además, alertó de que "hay tantos modelos en el mercado que el cliente no sabe hacia dónde va la industria; existe una incertidumbre sobre qué modelo se va a instalar".

En otro orden de cosas, el especialista de JLL quiso destacar la "escalabilidad". Explicó que "uno de los problemas existentes es que los aparcamientos que ya están con la nueva normativa que exigen unas recargas y unas infraestructuras ya preparadas, están listos, pero en los edificios donde esa infraestructura no se ha previsto, no hay potencia y hace falta una instalación completa".

En una de sus intervenciones, Sarai Gómez, coordinadora de Sostenibilidad Spain de Cushman & Wakafield, puso de relieve la predisposición de las compañías a "cumplir la normativa" actual. Sin embargo, recalcó que "la Administración echa el freno", ya que por un lado les obliga a instalar estos puntos de recarga pero, por otro lado, aún no existe una demanda suficiente para que sean rentables.

Martínez coincidió en que, cuando los ciudadanos "tomen la iniciativa porque lo vean como una ventaja o se traslade al mundo de la empresa, será un hito que propiciará que el sector particular se lance a comprar vehículos eléctricos". Y subrayó que "no tienes que obligar a nadie, tienes que dejar que la gente lo vaya probando, pero la desventaja económica sin duda es una gran barrera de inicio para tomar esta decisión". "Todo empieza por el uso particular y, cuando haya una adopción suficiente en el mercado particular, se trasladará al mercado de empresas", concluyó el representante de ChargeGuru Iberia.

Retos de presente y futuro

Los desafíos de presente y futuro en clave de movilidad sostenible son muchos y muy diversos. En concreto para este sector, Jorge Merino, head of Technical Department Logistics CBRE, manifestó la preocupación de los propietarios de edificios por los incendios de coches eléctricos. "Se está generando un temor añadido en las propiedades sobre qué pasa con un vehículo eléctrico si se incendia: ‘Si se produce un incendio de un vehículo eléctrico, ¿qué va a pasar con mi edificio?’. Son puntos que no están sujetos a una detección obligatoria".

El representante de CBRE instó a abordar este asunto desde un punto de vista complejo y amplio. Por eso, enfatizó que "la integración de estos cargadores dentro de los edificos debe ser estudiada de una manera conjunta".