Goldman Sachs da un potencial alcista a Puig del 18%, hasta los 30 euros, en un año

El banco de inversión estadounidense Goldman Sachs es positivo con la evolución de las acciones de Puig para los próximos tres meses. En concreto, los analistas de la entidad le dan un potencial de revalorización del 18,2% hasta los 30 euros por acción desde los 25,38 euros actuales en los que cotiza en bolsa y recomienda comprar sus acciones tras iniciar la cobertura de su seguimiento en bolsa.

Este miércoles, Puig podría acceder al Ibex 35, tras la reunión del Comité Asesor Técnico (CAT) del índice español. El grupo catalán de perfumería y cosmética cuenta con una capitalización bursátil de 15.270 millones, lo que le dejaría por detrás de Repsol en valoración.

Goldman Sachs prevé que las ventas del grupo de cosmética y perfumería Puig se eleven un 11% en los próximos tres años, mejorando así las previsiones de la compañía que avanzaban crecimientos de un dígito. Los analistas prevén este aumento impulsado por el segmento de las frangancias por parte de la Generación Z en Europa y en Estados Unidos, así como del fuerte potencial en China. Los expertos sostienen que Puig también se va beneficiar del despliegue de la marca Charlotte Tilbury, además de adquisiciones recientes como Byredo en 2022 y Dr. Barbara Sturm este mismo año.

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El banco estadounidense realiza este análisis tras cerrar hace unas semanas su primer mes como empresa cotizada con un alza en el precio de sus acciones del 7,2%, hasta alcanzar los 26,26 euros en esa jornada. Goldman Sachs, precisamente, fue el banco coordinador de la salida a bolsa junto a JP Morgan y Cuatrecasas el asesor legal.

Desde Goldman Sachs sostienen que su recomendación de compra se justifica por su visión positiva sobre las compañías dedicadas a la belleza global. Los riesgos principales a los que se enfrenta Puig son la posible desaceleración del mercado de los perfumes, ya que la categoría "ha sido históricamente más sensible al entorno macroeconómico", un mercado de fragancias cada vez más competitivo, la expansión en Asia podría limitar la expansión del margen y la evolución desfavorable de los tipos de cambio.