FINANCIACIÓN

Las sociedades de garantía inyectaron un 13% más de financiación a pymes y autónomos en 2023

El sector servicios y la industria, seguidos del comercio y la construcción, lideraron el número de operaciones

José Pedro Salcedo, presidente de SGR-Cesgar.

José Pedro Salcedo, presidente de SGR-Cesgar. / SGR-CESGAR

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Redacción

Las 18 sociedades de garantía recíproca que operan en España inyectaron financiación a pymes y autónomos en 2023 por valor de 2.572 millones de euros, un 13% más que el importe facilitado hace un año. El dinero concedido por estas compañías ya beneficia a 175.477 pequeñas y medianas empresas, autónomos y emprendedores que mantienen créditos y préstamos activos por valor de 7.622 millones de euros (riesgo vivo) y contribuyen al mantenimiento de un total de 978.523 puestos de trabajo. De cara al ejercicio actual, el sistema nacional de garantías prevé facilitar 2.775 millones de euros y seguirá teniendo un papel esencial en la canalización de los fondos Next Generation EU, gracias a los que ya ha podido facilitar 4.000 millones de euros a 30.000 pymes y autónomos.

"No cabe duda de que la ayuda que ofrece el sistema nacional de garantías a pymes y autónomos se ha convertido en un pilar esencial para su financiación”, asegura José Pedro Salcedo, presidente de SGR-Cesgar. Gracias al apoyo del reaval de la Compañía Española de Reafianzamiento (CERSA), "las sociedades de garantía continuarán ayudando, especialmente a las empresas que encuentren dificultades en el acceso al crédito debido a los altos tipos de interés". La institución también cuenta con 630 millones de euros otorgados a CERSA procedentes de la Adenda del Plan de Recuperación para canalizar financiación a otras 30.000 pymes en los próximos años.

Más avales en servicios y en industria

El importe medio avalado en las operaciones financiadas ascendió en 2023 a los 147.956 euros. Tres de cada cuatro avales (77,5%) ha tenido como destino una micropyme, con una plantilla de entre uno y diez trabajadores, mientras que la mayor parte del restante (21,7%) se ha dirigido a nuevas empresas o emprendedores.

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Por tipos, los avales financieros han sido la modalidad de financiación más demandada por pymes y autónomos (86,8%). Dentro de ellos destaca la demanda de los avales destinados a inversión (51%), aunque ha disminuido en algo más de tres puntos con respecto a 2022 hasta niveles similares prepandemia. Por otro lado, el importe de los avales destinados a circulante han experimentado un aumento por encima de los cuatro puntos porcentuales hasta suponer el 32,4% del total. Ambas cifras son el resultado de una creciente necesidad de liquidez por parte de las pymes en el último año debido a la escalada de la inflación, al encarecimiento de los costes de producción y a la subida de los tipos de interés que obstaculiza en gran medida el acceso al crédito.

El sector servicios ha sido quien ha liderado el número de operaciones (42,3%), seguido de los avales facilitados a la industria (26,7%). En este último caso, es destacable el Programa de Apoyo al Emprendimiento Industrial, promovido por el Ministerio de Industria y el sistema nacional de garantías, que ha canalizado 500 millones de euros a 1.900 pymes del sector industrial. Por detrás le siguen de cerca el comercio (17,9%), la construcción (8,7%) y el primario (4,3%).