¿Puede ChatGPT realmente beneficiar a Google?

El lanzamiento de ChatGPT ha sacudido el mundo de la tecnología y las inversiones. La inversión de Microsoft y la iniciativa Bing traen una competencia como nunca antes había tenido Google. La tecnología de inteligencia artificial (IA) continúa sorprendiéndonos, y el ritmo de desarrollo sólo se acelerará. La publicidad de los motores de búsqueda es un mercado global que genera cientos de miles de millones cada año. ¿Podrá en este caso Google mantener su liderazgo a partir de ahora?

 

 

La explosión en la publicidad de ChatGPT ha sido espectacular. El chatbot se lanzó el pasado 30 de noviembre de 2022 y rápidamente se convirtió en el tema de conversación de la comunidad tecnológica, pero también de la inversión. La inversión de 10.000 millones de dólares de Microsoft Corporation (MSFT) le otorga una credibilidad extrema y es una afrenta directa contra la empresa matriz de Google, Alphabet. Microsoft está impulsando a Bing a lo grande y destacando la capacidad de la IA en su motor de búsqueda.

 

Esta es una elección fácil para Microsoft porque no tiene nada que perder. Bing no marca la diferencia para la empresa, mientras que la base de Alphabet es la Búsqueda de Google sí que es una referencia y cualquier cambio negativo tendría una gran sensibilidad en sus resultados futuros. Por ahora, muchos textos e informes apuntan a Microsoft como el rey de la IA, pero como inversores no debemos precipitarnos, ya que es como declararse vencedor de un torneo sólo por haber ganado el primer partido de clasificación. Hasta donde sabemos, Google ha estado usando y desarrollando IA durante años, según recoge un informe de los analistas de XTB.

 

 

El protagonismo de los chartbots

 

Los chatbots son aplicaciones impulsadas por inteligencia artificial que interactúan con nosotros de forma conversacional. Si alguna vez ha utilizado la función de "chat" en un sitio web, probablemente esté familiarizado con ese tipo de interacción. Estos son principalmente bots de bajo nivel y que tienen una capacidad limitada para gestionar y resolver consultas. Estos ahorran dinero a las empresas en servicio al cliente y son mucho más convenientes para la mayoría de los consumidores (a nadie le gusta esperar). Los bots más sofisticados que conocemos incluyen a Alexa de Amazon (AMZN) y Siri de Apple (AAPL), que aprenden tendencias y ofrecen más matices.

 

No es una tecnología nueva. Sin embargo, ChatGPT tiene la capacidad de generar contenido en base a unos criterios de entrada del usuario. El usuario puede pedirle que escriba canciones, redacte textos y correos electrónicos, planee un viaje e incluso escriba artículos como este (no es el caso).

Ventas de los buscadores

El buscador de Google lo es todo para Alphabet. Google Search y Google Network representan el 69% de las ventas de la empresa y una parte aún más significativa de los ingresos operativos, ya que Google Cloud sigue generando pérdidas. La Búsqueda de Google ha crecido sin las trabas de una competencia que pudiera hacer daño durante muchos años y es imprescindible para los anunciantes. Los consumidores que buscan productos en Google están listos para comprar, a diferencia de los anuncios de televisión o web que pueden llegar a una gran audiencia de personas que están fuera del mercado.

 

Esto le da a Google un tremendo poder de fijación de precios. Los ingresos de búsqueda casi se han duplicado desde 2018, como se muestra a continuación. Por ello, es fundamental que Google contraataque con todo lo que tiene por conservar su posicionamiento y liderazgo.

 

Google ha estado desarrollando nuevas funciones de inteligencia artificial para su motor de búsqueda durante años, pero aún no se ha motivado para lanzarlas al mercado. Este podría ser el momento que necesita Google para reaccionar. Por ejemplo, Google ha desarrollado una función de "búsqueda múltiple" que funciona junto con Google Lens. Un usuario podría tomar una fotografía de una pieza de automóvil necesaria, por ejemplo, y buscar "dónde comprar cerca de mí" para encontrar un minorista y el nombre de la pieza.

 

Hace unos días, Google hizo una demostración de su chatbot, denominado Bard, que ha estado en proceso de desarrollo durante años. El mercado estaba angustiado durante la demostración porque Bard dio una respuesta incorrecta sobre telescopios e imágenes de planetas fuera de nuestro sistema solar. Al igual que ChatGPT y cualquier otro motor de búsqueda, depende de los datos subyacentes. Cuando la realidad fue que el origen de la información recabada por Bard de internet era errónea. Los que para aquellos que investigaron lo sucedido fue una oportunidad para entrar en la compañía con un descuento adicional del 7% cuando abrió el mercado. 

Otras iniciativas incluyen YouTube Shorts (la respuesta de la compañía a TikTok) y YouTube TV, donde se retransmitió en directo la última final de la Super Bowl. Recordemos que ChatGPT no es un producto terminado. Los datos en los que se basa son de 2021 y no se actualizan en tiempo real. Esto puede no parecer significativo, pero pensándolo fríamente. ¿Sería relevante un artículo de inversión actual basado en datos de 2021?

 

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Del mismo modo, el experimento de Microsoft Bing es solo eso. La empresa ha intentado durante años atraer a los usuarios a su plataforma y aún no ha demostrado la capacidad de hacerlo. Es probable que Bing experimente un ligero aumento por parte de los usuarios curiosos, pero estos volverán rápidamente al motor de búsqueda de Google (Chrome). Así como la difícil situación económica está motivando a la dirección de Alphabet a optimizar las operaciones, es posible que Microsoft haya empujado al oso.

Es importante observar con perspectiva los desarrollos tecnológicos revolucionarios y los inversores en IA deberían ver en el ejemplo de muchas otras tendencias "revolucionarias" que fracasaron y costaron a los inversores desprevenidos sus capitales. Recordemos el furor de la impresión 3D que llevó acciones como Stratasys (SSYS) y 3D Systems (DDD) a niveles astronómicos. Los ejemplos recientes incluyen a los favoritos de la pandemia Peloton (PTON) y Carvana (CVNA). Y el sector de las IA podría no estar excluida de esta lista.