La inversión inmobiliaria alcanzó los 17.500 millones en 2022

2022 ha sido un año histórico para la inversión inmobiliaria, con un volumen de 16.400 millones de euros en transacciones, un 30% más que el año pasado. La cifra asciende a 17.500 millones de euros si se incluyen las operaciones corporativas, según el “Informe de Inversión Inmobiliaria 2022 en España”, elaborado por la consultora inmobiliaria Catella. La vivienda sigue siendo el activo más interesante para los inversores, con 3.100 millones de euros en operaciones, el 60% de ellas de build to rent, pisos que se construyen para poner en alquiler.

Las oficinas han captado inversiones por valor de 2.800 millones de euros durante el pasado año. "El sector de las oficinas sigue siendo estratégico y el interés de los inversores por ubicaciones y activos prime sigue siendo alto. En este sentido, la demanda se centra en propiedades ya alquiladas y en buenas ubicaciones, con altos estándares de sostenibilidad", comentan los autores del informe. También los hoteles han estado en el foco de los grandes fondos de inversión, con 2.400 millones de euros en inversiones.

Sin duda, el segmento estrella han sido los activos comerciales, que han registrado la mayor operación inmobiliaria del año, la recompra por parte de BBVA a Merlin Properties de 659 sucursales bancarias y tres edificios de oficinas por un importe de 1.987 millones de euros. En total, este segmento ha transaccionado la cuantía récord de 3.900 millones de euros.

Las naves logísticas registraron una cifra similar a la de 2021, con 2.250 millones de euros en 2022; mientras la inversión en activos alternativos, como las residencias de estudiantes o de ancianos, se ha duplicado, hasta los 1.950 millones de euros. "Las residencias de estudiantes y de la tercera edad, y en general cualquier activo relacionado con las diferentes formas de vivir, se encuentran entre los más atractivos en estos momentos", resalta Catella.

Incertidumbre macroeconómica

Noticias relacionadas

Sequía y energía unen Canarias con Cabo Verde para buscar soluciones comunes

Los cinturones de seguridad de Puig

El informe apunta que "la actividad se ha ralentizado tras el verano de 2022, anticipando la tendencia que se vivirá en el primer semestre de 2023". Como consecuencia inmediata habrá un aumento en la rentabilidad exigida por los inversores a la hora de comprar nuevos activos, lo que se traduce en un menor valor de estos. Entre las causas del aumento de las yields (rentabilidades) se sitúan el encarecimiento de la financiación y la elevada inflación.

“Aunque el año 2022 ha dejado una cifra récord en cuanto a inversión inmobiliaria en España, también ha supuesto un cambio en el ciclo del mercado inmobiliario. El año pasado iba a ser el año de la reapertura después de la pandemia, pero pasó a ser el año de la guerra, alta inflación y problemas energéticos. Por ello estimamos que el inicio de 2023 estará marcado por la incertidumbre y el aumento de la volatilidad", concluye Carlos López, consejero delegado de la consultora en España.