SOSTENIBILIDAD

Placas solares para no depender de China

La compañía valenciana Silicon Valen se ha propuesto cubrir el proceso integral de fabricación de placas fotovoltaicas desde la transformación de silicio siderúrgico en silicio solar al ensamblado de los paneles solares

Marcos J. Lacruz y Manuel Argüelles (cofundadores de Silicon Valen) con una de sus placas en el centro de València

Marcos J. Lacruz y Manuel Argüelles (cofundadores de Silicon Valen) con una de sus placas en el centro de València / GERMÁN CABALLERO

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Ramón Ferrando

La compañía valenciana Silicon Valen se ha propuesto cubrir el proceso integral de fabricación de placas fotovoltaicas desde la transformación de silicio siderúrgico en silicio solar al ensamblado de los paneles solares. La firma surgió de la necesidad de un grupo de promotores de garantizarse el suministro de placas solares que hasta ahora proceden de Asia durante los cortes de suministro por la pandemia.

La compañía va a empezar por el montaje de placas (que es la parte final del proceso) para en un plazo de tres años abarcar toda la cadena de valor con cuatro fábricas que acometan cada uno de los procesos de producción. Marcos J. Lacruz (cofundador de Silicon Valen y presidente de la patronal de empresas de energías renovables de la Comunidad Valenciana, Avaesen) lamenta que actualmente no hay ni una empresa europea que se dedique a fabricar paneles solares tras el desmantelamiento de la industria hace una década.

La Unión Europea quiere impulsar la fabricación de paneles solares para acabar con la dependencia de China. La secretaria de Estado de Energía, Sara Aegesen, anunció hace un mes que España volverá a producir paneles fotovoltaicos. "España va a liderar un Proyecto Importante de Interés Común Europeo (Ipcei) de fabricación de paneles solares en Europa. Tenemos que conseguir más autonomía estratégica y seguridad energética", recalcó Sara Aegesen durante la inauguración del Foro Solar 2022, evento que organiza de manera anual la Unión Española Fotovoltaica, UNEF (la patronal nacional).

Silicon Valen la han constituido la familia Navarro (propietaria de la desaparecida firma de placas Siliken), el desarrollador de parques fotovoltaicos Manuel Argüelles y la firma de Marcos J. Lacruz, NRG Investment (promotora de parques fotovoltaicos y eólicos). Siliken fue un grupo valenciano de empresas dedicado al desarrollo de soluciones aplicables al sector de las energías renovables, con presencia en España, Estados Unidos, Italia, Francia y Alemania, que llegó a tener 1.500 trabajadores y que sucumbió como consecuencia de la crisis financiera de 2008. La empresa de la familia Navarro invirtió 80 millones de euros en una fábrica de desarrollo de silicio para las placas y Lacruz quiere aprovechar ahora su conocimiento del sector.

Europa se quedó hace 10 años sin fábricas de módulos fotovoltaicos por la competencia de las firmas chinas. Los promotores de Silicon Valen lamentan que Alemania vendió la tecnología a los fabricantes asiáticos y China aprovechó la oportunidad para financiar con dinero público a las empresas, que se quedaron con el 95% del mercado mundial. Es una situación similar a la que ha pasado con la fabricación de microchips o la de baterías de coches eléctricos. Bruselas quiere revertir esta situación e impulsa con ayudas públicas el desarrollo de plantas de baterías (como la de Sagunt) y de microchips. La Comisión Europea también quiere incentivar proyectos como el que desarrolla Silicon Valen.

Las tecnologías actuales permiten obtener silicio de grado metalúrgico a partir de la arena de las playas. Muchas empresas procesan ese material para su posterior uso industrial. Pero la firma valenciana Silicon Valen ha dado un paso más y va a enriquecer al máximo ese silicio al darle un 99,9% de pureza y transformarlo en el denominado silicio de grado solar, la materia prima indispensable para generar energía fotovoltaica.

Ese silicio solar se compacta y se convierte en lingotes. Estos se cortan en miles de obleas y con ellas se obtienen las células fotovoltaicas que integran después las placas y módulos solares. La firma valenciana ha arrancando con una inversión inicial de capital privado de 12 millones de euros (suficientes para la fábrica de ensamblado), aunque para cubrir toda la cadena de valor se requieren 500 millones. Silicon Valen empezará a producir y pondrá sus primeros paneles solares de España en septiembre de 2023.

Compromisos de venta

Silicon Valen ya tiene comprometidas las ventas de la producción de sus primeros tres años. El grupo ha logrado compromisos de compra que cubren una producción anual de 500 megavatios (el equivalente al 20% de las placas que se instalan anualmente en el país). En España hacen falta 5 millones de módulos fotovoltaicos al año para hacer frente al actual despliegue de parques renovables.

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"Nuestra obsesión es garantizar la estabilidad del suministro. Detrás del proyecto estamos promotores de parques fotovoltaicos que necesitamos tener el suministro garantizado. Los módulos que vamos a producir no son más económicos que los asiáticos, pero tampoco van a ser más caros. Esto lo conseguimos gracias a un esfuerzo en innovación porque competimos con gente (los fabricantes chinos) que tiene otras reglas del juego con costes laborales más bajos", apunta el empresario Manuel Argüelles. 

Marcos J. Lacruz asegura que ahora mismo no hay ninguna empresa en el mundo que cubra todo el proceso de producción de las placas solares como aspira a hacer Silicon Valen. La primera fábrica de Silicon Valen contará con una plantilla de 50 trabajadores y todavía no se ha desvelado su ubicación. La idea es que cuando la empresa esté a pleno rendimiento dé empleo a 1.200 trabajadores, la mitad de cualificación muy alta como ingenieros y programadores.