CONTAMINACIÓN

Parques infantiles contra la polución

La empresa Synthelast fabrica un pavimento que combate la contaminación urbana

Proceso de fabricación y muestras de suelo.

Proceso de fabricación y muestras de suelo. / ÁXEL ÁLVAREZ

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Miguel Vilaplana (Información)

En un momento en el que las ciudades cada vez adoptan más medidas para luchar contra las emisiones generadas sobre todo por los vehículos, la empresa Synthelast, ubicada en Elche, ha desarrollado un pavimento, especialmente indicado para parques infantiles, capaz de reducir la contaminación ambiental. Se trata de un suelo, elaborado a partir del reciclado de neumáticos, que cuenta con propiedades fotocatalíticas. Sus efectos están contrastados y debidamente certificados, y ya han despertado el interés de numerosos ayuntamientos.

Synthelast nació en 1973, por lo que está a punto de cumplir los 50 años de trayectoria. Desde un principio ha estado vinculada a la industria del calzado, algo que no es extraño si se tiene en cuenta que Elche es toda una potencia en este sector. Según explica su director general, Francisco Rodríguez, en sus orígenes se dedicó a la elaboración de un material para la fabricación de suelas, como es el poliuretano, que hasta entonces prácticamente era un desconocido para las firmas zapateras de la zona. Después, de forma paulatina, fue introduciendo otros elementos como el PVC y el caucho, todos dirigidos a la misma finalidad.

Con todo, no fue hasta hace diez años cuando la firma decidió adentrarse también en el sector de la construcción, a la vista de que estos mismos materiales podían aprovecharse igualmente en este ámbito. Y todo ello, destaca Rodríguez, con base en criterios de sostenibilidad. Según sus palabras, "en nuestra fabricación utilizamos productos reciclados propios o de nuestros clientes, principalmente suelas de zapatos, o los sustituimos por productos no petrolíferos, procedentes en su mayor parte de aceites que han agotado su vida útil y que tienen propiedades plastificantes".

En este contexto, es cuando surgió la oportunidad de elaborar pavimentos de caucho para parques infantiles. Fue a través de un acuerdo con la empresa murciana Reciclado de Neumáticos y Caucho (RNC), la cual se encarga de triturar las ruedas para que posteriormente Synthelast proceda a su compactación y coloración.

Con todo, la firma ilicitana quiso dar un paso más, aplicando técnicas que ya se utilizan en otros sectores, como es la propia construcción, para lograr un efecto descontaminante en este tipo de suelos. Se trata, según explica el director de la empresa, de un proyecto, respaldado por el Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI), que ha tenido un proceso de investigación de más de tres años. "Lo que buscábamos -explica el director de la compañía- es aplicar al pavimento de neumáticos un agente fotocatalítico especialmente diseñado en nuestro laboratorio, denominado Idsum, el cual es capaz de romper las moléculas contaminantes cuando reciben la luz solar. También a la luz de las farolas tiene efectividad, aunque en un menor porcentaje".

Sus efectos fueron comprobados primero en el laboratorio Euphore, y después en pruebas de campo, gracias a la instalación de un parque infantil en Murcia, donde se ha podido constatar que este suelo, según Rodríguez, es capaz de reducir en un 16% la contaminación de óxidos nitrosos, e incluso combatir virus y bacterias. "Se trata de unos resultados muy positivos, sobre todo si se tiene en cuenta que son zonas muy frecuentadas por niños. Además, hablamos de un contexto, como es el actual, en el que las ciudades están tomando medidas para combatir la polución, cerrando incluso zonas urbanas al tráfico para reducir las emisiones que producen los vehículos", apunta.

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La iniciativa le ha valido tanto a Synthelast como a AEC alzarse con el prestigioso galardón internacional Escoba de Plata 2022, que concede la Asociación Técnica para la Gestión de Residuos y Medio Ambiente (Ategrus). El pavimento en cuestión ya se ha instalado también en varios municipios canarios, al tiempo que ha despertado el interés de numerosos ayuntamientos, que ven en este material una fórmula para proteger a los niños y niñas, y contribuir a sus políticas contra la contaminación ambiental.

La empresa confía en que este nuevo producto suponga un empujón para su creciente cifra de negocio, toda vez que, según explica Francisco Rodríguez, esperan incrementar este año en un 30% la facturación de 5,7 millones alcanzada el ejercicio pasado.